Con la entrega de una biblioteca digital para las personas no videntes se cerró, el viernes pasado, la Conferencia de Alto nivel sobre Seguridad Operacional y Cuidado Ambiental, en San Cristóbal, Galápagos.
Esta biblioteca constituye un plan piloto que entregó la Dirección de Aviación Civil (DAC) a la Organización de Aviación Civil Internacional (OACI). Se trata de discos duros con audios con más de 100 libros sobre literatura clásica, infantil, historia, filosofía y otros.
El objetivo es instalar esta biblioteca en un aeropuerto (la OACI aún no tiene definido) como opción de actividades para las personas no videntes, mientras esperan sus vuelos. Esta iniciativa fue mentalizada por Luis Cueva, quien perdió su ojo izquierdo (con el derecho ve un 5%) en 1997, tras la explosión en el fuerte militar de La Balbina, en Los Chillos.
A la cita de la OACI asistieron autoridades nacionales y locales, delegados de 17 países y representantes de líneas aéreas y empresas vinculadas con la aeronáutica mundial.
Durante la clausura, el vicepresidente Lenín Moreno recalcó que el Gobierno pone énfasis en el desarrollo aeronáutico. Citó como uno de esos ejemplos al proyecto de construcción del aeropuerto ecológico de Baltra, en Galápagos, el primero de estas características a escala mundial. Además, habló de la inversión para fomentar el comercio y el turismo interno con nuevos aeropuertos, como los de Santa Rosa y de Tena.