Ayer, los recolectores nuevos permanecían en los patios del Puerto de Esmeraldas. Foto: Marcel Bonilla / El Comercio
Para diciembre se estima que la recolección de basura en Quito alcanzará cerca de 66 700 toneladas. Esto es el 14% más que el mismo mes del 2017.
Históricamente, diciembre se ubica entre los meses en los que más cantidad de toneladas se recolecta, debido a las fiestas de Quito, Navidad y fin de año. Pero ese no es el único factor que incrementa la cifra de desechos recogida. Según la Empresa Metropolitana de Aseo (Emaseo), en las épocas lluviosas la basura se moja y se vuelve más pesada.
Según las proyecciones, este diciembre superará el mes de mayor producción de desechos en la ciudad en los últimos dos años, que fue mayo del 2017, con 65 025 toneladas.
Para enfrentar la crisis en la recolección que bajó la puntualidad en el servicio de un promedio de 74% a un 63% el año pasado, la empresa decidió renovar su flota.
Estaba previsto que ayer salieran desde el puerto de Esmeraldas 37 nuevos camiones que Emaseo compró al consorcio Recobac y que cuenta con unidades de la marca Econovo, de Argentina, y AMS, de Italia.
El próximo lunes, 23 camiones se sumarán a la flota actual y se usarán para reforzar la recolección en sectores como Solanda, La Roldós, el Comité del Pueblo, Rumiñahui, Quitumbe, El Camal y La Ofelia, que están entre los de mayor producción de desechos.
En cuatro meses la flota se completará con 54 vehículos entre nuevos y repotenciados. Actualmente, el Municipio opera con 70 unidades y con un refuerzo de 85 volquetas, ocho plataformas y cuatro montacargas contratados.
La idea, según Paúl Luzuriaga, coordinador general técnico de Emaseo, es integrar los nuevos vehículos y paulatinamente retirar la flota de apoyo. Se estima que el próximo año, en total, se recojan 765 440 toneladas de basura, 64 000 más que en el 2017, y que se pueda alcanzar una puntualidad en el servicio del 90%.
El costo de los nuevos vehículos alcanza los USD 15 millones y el mantenimiento y servicios complementarios durante cinco años será de USD 58 millones. La nueva flota se usará para recoger el 75% de los residuos producidos en la urbe al año y el 25% restante se levantará con la flota existente.
Los vehículos nuevos cuentan con rastreo GPS y tienen lifters o levantacontenedores. A futuro se espera sustituir la recolección a pie con la recolección de minicontenedores, para vehículos de carga posterior, y contenedores estándar para los de carga lateral.
Actualmente se está revisando la cobertura de las rutas y se ampliará hacia, sobre todo, los barrios altos y periféricos. También se aumentará la frecuencia de recolección en días clave, como los domingos en el Comité del Pueblo o La Ofelia. El plan es evitar que esos sectores amanezcan los lunes con basura acumulada, producto de los desechos que quedan tras los días de feria.
En Quito, en los últimos cuatro años, se recolectó un promedio de 2 200 toneladas de basura diarias, pero en los días pico, como en las festividades decembrinas, pueden llegar hasta 3 000 toneladas.
Eso suele ocurrir en aquellos días en los que hay actividades multitudinarias por fiestas de Quito, por ejemplo.
Por eso se reforzarán también los trabajos a cargo de cuadrillas de barrido manual, barrido mecánico e hidrolavado. Adicionalmente, se colocan baterías sanitarias. Entre las actividades que tiene previsto cubrir Emaseo están la semifinal de la carrera de coches de madera Jorge Aguilar Veintimilla, hoy, en la calle Río de Janeiro, y la final, el sábado, en Las Casas. También habrá personal en las carreras de La Michelena, la Marta Bucaram y San Luis de Chillogallo.
Entre las actividades que más atención requieren están el Desfile de la Confraternidad, que se realizará en la Tribuna de los Shyris, el 2 de diciembre, y en la Tribuna del Sur, el 3. También están los conciertos Quitonía y las fiestas como el Carolinazo y el Tribunazo.