Nueva regulación a la liquidez bancaria

El Directorio del Banco Central (BCE) nuevamente reguló el esquema de reservas mínimas de liquidez que el sistema financiero debe mantener dentro del país.

A partir de 2009, el BCE estableció que este sector debía repatriar del exterior 45% de los depósitos en el extranjero para canalizarlos en el mercado nacional.

Esta disposición significó que retornen unos USD 600 millones, que tradicionalmente se invertían en bancos del exterior, hasta fines de septiembre de 2009.

Pero a esta regulación se sumó otra (007-2010) del 26 de febrero pasado, la cual modificó la composición de estas reservas mínimas de liquidez.

En otras palabras se incluyeron nuevas cuentas o instrumentos que pueden ser parte de este 45% de liquidez que las entidades deben mantener en el país.

Por ejemplo, se resolvió que las instituciones constituyan sus reservas con títulos valores de renta fija del sector no financiero por un mínimo del 1%.

Es decir, obligaciones o papeles que emiten las empresas y que se negocian en el mercado de valores ecuatoriano.

Los bancos y demás entidades deberán tener invertido el 0,5% de sus reservas en este tipo de instrumentos, hasta el 31 de agosto.

Y completar el 1% hasta el próximo 31 de diciembre.

Para el gerente de Procredit, Pedro Arriola, con esto el sector productivo tendría una inyección de recursos y financiamiento a través del mercado de valores.

Además, se dio vía libre para que incluyan en sus reservas depósitos a la vista en instituciones financieras nacionales. Esto es, por ejemplo, cuentas de ahorros.

También pueden invertir en certificados de depósito en instituciones financieras nacionales con plazos no mayores a 90 días.

Arriola añade que este tipo de activos ya constaban en las normas de la Superintendencia de Bancos, pero no en las del BCE, por lo que ahora con esta regulación se igualan los criterios.

Estos últimos instrumentos deben ser parte de las reservas de liquidez doméstica hasta el 31 de mayo próximo.

En el caso de las cooperativas, la regulación determina que podrán constituir sus reservas con certificados de depósitos a 90 días en instituciones financieras.

En términos generales, parecería que la regulación solo incluye estos cambios, pero los banqueros están calculando si en la práctica significará una mayor repatriación de recursos. La Asociación de Banco Privados, hasta ayer todavía estaba analizando el impacto de la medida.

Sin embargo, para Antonio Acosta, presidente del Banco Pichincha todas estas decisiones son “incomprensibles”. Según dijo ayer en radio Democracia, se toman “en absoluta confidencia, encerrados, enclaustrados, con 2 ó 3 personas al mando de don Diego Borja (ministro de la Política Económica), poniendo en riesgo la estabilidad de un país...”.

Debido a la presión fiscal que este momento tiene el Gobierno, Acosta cree que ahora se está obligando al sistema a traer la plata y tenerla en las bóvedas.

Incluso, señaló que tan pronto “se les acabe la plata del IESS, lo siguiente será la plata de los depositantes” y en este punto se preguntó: ¿Si no hay demanda qué vamos a hacer con ese dinero?

“Lo que están haciendo es debilitar al sistema financiero, que en un momento dado puede generar un colapso impredecible y le repito la responsabilidad será de nuestro amigo Diego Borja”.

El ministro, por su parte, no ha explicado la intencionalidad de esta reciente medida.

En la tarde de ayer, el BCE comunicó que Borja dará una rueda de prensa el lunes, a las 10:00.

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