Miles de personas marcharon hoy, 12 de noviembre de 2016, en Nueva York en contra del electo presidente de EE.UU. Donald Trump. Foto: AFP.
El presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, se reunió hoy 12 de noviembre de 2016 en sus oficinas de Manhattan con el líder del Partido por la Independencia del Reino Unido (UKIP), el británico Nigel Farage. Mientras tanto, manifestantes expresaban su repudio frente a la Trump Tower por la victoria electoral del magnate republicano cuatro días atrás frente a la demócrata Hillary Clinton.
Los periodistas vieron a Farage ingresar esta tarde a la Trump Tower, donde el impulsor del Brexit aseguró que él era “simplemente turista“.
No estuvo claro si se había reunido con el mandatario electo hasta que la manager de campaña de Trump, Kellyanne Conway, dijo a los reporteros que su jefe mantuvo un encuentro “muy productivo” con Farage.
“Creo que disfrutan mutuamente de su compañía y tuvieron absolutamente la oportunidad de hablar sobre libertad y ganar y lo que todo eso significa para el mundo”, apuntó.
Conway explicó que Trump y sus asistentes están inmersos en una “transición presidencial normal”, pero que es posible una “gira de la victoria” durante la próxima semana.
La inesperada victoria electoral de Donald Trump, pese a finalizar por detrás de Hillary Clinton en el voto popular, fue comparada al triunfo en junio pasado del referéndum sobre el Brexit en el Reino Unido, que tampoco fue pronosticado por las encuestas.
Mientras tanto, durante una de las aparentemente mayores manifestaciones desde la elección de Trump, miles de personas marcharon en Nueva York para protestar contra el controvertido magnate, mientras coreaban “not my president” (No es mi presidente) y portaban carteles que decían “No Trump”.
Un portavoz de la policía de Nueva York dijo que la marcha de protesta hacia la Trump Tower, sede de la empresa y residencia del presidente electo en la Quinta Avenida en Manhattan, comenzó alrededor de las 13:00 en Union Square.
“Hasta ahora no hay arrestos”, afirmó el portavoz de la NYPD, que no quiso ser identificado, ni tampoco brindó datos sobre la cifra de manifestantes.
Según sus informaciones, solamente estuvo cerrada la calle aledaña 56th Street. Trump y su esposa, Melania, viven en un opulento penthouse en la cima de la Trump Tower.
La retórica incendiaria de Trump durante la campaña, así como su anterior comportamiento personal y empresarial, recibieron numerosas condenas de grupo de derechos civiles que representan a los latinos, musulmanes, inmigrantes y mujeres.
Durante las manifestaciones desde el miércoles en varias grandes ciudades se produjeron cientos de arrestos por violencia y vandalismo en Oakland, California, y Portland, Oregon.
La multitud en Manhattan se incrementó durante la tarde y parecía llenar varias cuadras de la Quinta Avenida. Posteriormente la Trump Tower fue cerrada al público, mientras aumentaba la cantidad de personas en las calles.
El cineasta Michael Moore pudo ingresar al lobby del rascacielos, que recorrió durante un rato, y subió escaleras mecánicas hasta el cuarto piso, antes de ser llevado del lugar por un agente del servicio secreto.
Trump se había subido a la misma escalera mecánica en junio de 2015, durante un evento de prensa en el que declaró su candidatura presidencial. “Simplemente pensé que quería ver si podía entrar a la Trump Tower”, dijo el documentalista Moore a un periodista, y “subirme a la famosa escalera mecánica”.
Mientras tanto, Conway apuntó que, de acuerdo con su conocimiento, Trump aún no conversó con el presidente ruso Vladimir Putin.
En los próximos días Trump le hablará al pueblo estadounidense, explicó Conway. Actualmente disfruta en la Trump Tower del tiempo con su familia, recibe a muchos visitantes y realiza numerosos llamados telefónicos.
Muy pronto el presidente electo decidirá sobre el cargo de jefe de gabinete, añadió. El equipo de Trump “está trabajando las 24 horas”, dijo. Conway no quiso entrar en precisiones acerca de si podría ocupar un cargo y cuál sería. Como manager de la campaña electoral, se convirtió en una figura decisiva para Trump.