Los viajeros a Caracas desesperan

PATRICIO TERÁN / EL COMERCIO

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Los pasajeros de Tame, que tenían previsto viajar a Caracas, están desesperados por viajar. Ayer en la mañana, cerca de 80 personas que tenían pasajes con destino a Caracas no pudieron embarcarse por la suspensión de los vuelos.

Tame suspendió desde ayer 23 de enero las operaciones a Venezuela porque no ha recibido USD 43,1 millones, desde abril del año pasado, por los pasajes vendidos en Venezuela.

Según representantes de la aerolínea ecuatoriana, no ha sido posible concretar la transferencia a pesar de reuniones y gestiones a nivel de gobierno.

Ayer, en los mostradores de Tame en el aeropuerto de Tababela, decenas de pasajeros, entre ellos madres de familia con niños, se enteraron de la suspensión de la ruta a Caracas y exigieron una solución al personal de la compañía.

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Los reclamos de los clientes llegaron a la oficina matriz de Tame, en el centro-norte de Quito. Carlos Pilaguano, un ecuatoriano que reside en Venezuela hace más de 20 años, esperaba en las afueras de las oficinas un pronunciamiento de las autoridades para poder llegar a su destino.

Pilaguano llegó a Quito el pasado 26 de diciembre y su boleto de regreso tiene fecha 25 de enero. "Estoy muy preocupado, no nos dicen nada y no sabemos cuándo regresaremos a Venezuela".

Junto a Pilaguano, una mujer venezolana que prefirió no identificarse intentaba ingresar al edificio donde funcionan las oficinas de Tame. "Debo viajar el domingo próximo y estoy desesperada".

Entre las personas que reclamaban había pasajeros que acudieron ayer en la mañana a Tababela. Ellos decidieron ir hasta las oficinas para exigir el reembolso de los tiquetes aéreos. Hasta las 13:00 de ayer, al menos unas 35 personas aguardaban con preocupación en los exteriores del edificio de Tame.

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Los voceros de la compañía señalaron que de los cerca de 80 pasajeros que debían ir en el vuelo de la mañana, unos 50 aceptaron el hospedaje y la alimentación que Tame brindó, como parte de la normativa que rige en el negocio de la aviación civil. Los demás estaban inconformes y negociando por más beneficios.

Hasta el cierre de esta edición Tame analizaba las alternativas para transportar a los pasajeros que tenían pasajes para Caracas en estos días. Entre las opciones el hacer vuelos chárter o llegar a acuerdos con otras aerolíneas que todavía aterrizan en Caracas.

Tame abrió la ruta entre Quito y Caracas en septiembre del 2012. Fue parte de una ruta mixta (Quito-Bogotá-Caracas), en la que el 70% de los pasajeros tenía como destino final la capital venezolana. El 30% restante viaja a Bogotá.

Según voceros de la aerolínea, la mayoría de venezolanos que venía al país se registraba como turista.

  • Una millonaria deuda

Varias cifras muestran que las compañías de aviación que operan desde y hacia Venezuela sufren una suerte de turbulencia financiera. Los USD 43,1 millones que la aerolínea ecuatoriana Tame no puede cobrar a Venezuela son apenas parte de una multimillonaria deuda.

El Grupo Avianca tiene en Venezuela USD 290 millones por cobrar entre diciembre del 2012 y noviembre del 2013. El grupo Latam (que agrupa a Lan y TAM) reportó, por su parte, USD 710 millones por recibir.

H asta el tercer trimestre del año pasado American Airlines no recibía la transferencia de USD 608 millones, según la publicación Portafolio, de Colombia, y el diario estadounidense El Nuevo Herald.

La aerolínea de bandera panameña, Copa, tenía un saldo por cobrar de USD 393 millones hasta septiembre pasado.

En total, el monto de dinero que no ha podido ser transferido desde Venezuela a las aerolíneas llega a USD 3 300 millones, según cifras de la Asociación Internacional del Transporte Aéreo (IATA por sus siglas en inglés).

Esas deudas no se pueden cobrar por una política económica del Gobierno de Venezuela, que restringe la salida de divisas. En el caso específico de Tame, los recursos de la deuda pendiente se encuentran en el Banco Central de Venezuela, en la Comisión de Administración de Divisas (Cadivi).

Ayer, la agencia de noticias económicas Bloomberg señaló que las compañías aéreas tienen que esperar alrededor de 12 meses para que las autoridades venezolanas conviertan los bolívares en dólares.

Un dólar se cotiza oficialmente en 6,30 bolívares, pero el Gobierno anunció el miércoles pasado un esquema de 'bandas cambiarias' , donde el dólar será de 11,30 bolívares para las aerolíneas y turistas, entre otros.

El contexto
La aerolínea ecuatoriana Tame suspendió temporalmente la ruta Quito- Caracas, ayer jueves. La compañía volaba a la capital venezolana desde septiembre del 2012, pero problemas con la transferencia de recursos desde Venezuela obligaron a tomar la medida.

5 836 pasajeros volaban en promedio cada mes en la ruta Quito-Caracas-Quito

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