La Superintendencia de Bancos y Seguros validará las características, beneficios, servicios adicionales prestados y tarifas de afiliación y renovación por cada tarjeta de crédito.
Así lo establece la Resolución JB-2011-2088, del 22 de diciembre pasado, en la cual la Junta Bancaria también definió las tarifas máximas que las entidades pueden cobrar por los servicios financieros p entre enero y marzo del 2012.
En la misma resolución se clasifican a las tarjetas de crédito en cinco segmentos: A, B, C, D y E, en función de los servicios de afiliación y renovación. “Dentro de cada uno de los segmentos descritos se considera también la subclasificación “más” (+), que se diferencia de la clasificación regular porque las tarjetas “+” otorgan algún programa de lealtad o recompensa adicional”.
Según la resolución, “ninguna tarjeta de crédito podrá ser ofertada, si es que no ha sido validada por la Superintendencia. La normativa pudiera obligar a una reclasificación de una o más tarjetas de crédito que circulan en el mercado.
En la normativa se definen los 16 servicios gratuitos para el cliente como apertura de cuentas, transferencias dentro de la misma entidad, cierre de cuentas, mantenimiento, etc.