Quito paga un alto costo por las lluvias

Las lluvias que cayeron en Quito durante abril dejaron hasta la semana pasada 11 muertos, una decena de heridos y un daño económico que aún se está cuantificando. Además, la infraestructura de la ciudad otra vez se puso a prueba con deslizamientos, inundaciones, dificultades en el tránsito y viviendas destruidas.

El año pasado, el Municipio de la capital destinó cerca de USD 15,4 millones en el plan emergente vial. Ahora, para este año, el plan de mantenimiento vial es de USD 20 millones. Pero solo en las emergencias registradas en las primeras tres semanas de abril se destinaron USD 2 millones, según la Empresa Pública Metropolitana de Movilidad y Obras Públicas.

Entre el 1 y el 27 de abril, el Municipio registró 320 emergencias atendidas. Otro dato que ayuda a graficar la magnitud del invierno es el número de deslaves: en abril del 2010 fueron 6 y en abril de este año, 80.

En el Municipio aún no se cuantifica el impacto económico del invierno. Lourdes Rodríguez, titular de la Secretaría de Seguridad y Gobernabilidad del Cabildo, explica que se maneja un plan de emergencia que cuenta con USD 2,3 millones. De esa cifra, 920 000 se utilizaron en obras de mitigación contra el temporal.

Los sectores productivos y los negocios particulares también acusan el efecto del invierno. En el sector de transporte público, por ejemplo, la demanda de pasajeros se redujo un 20% durante abril, según José Santamaría, titular de la Cámara de Transporte Masivo de Quito.

Las lavadoras de autos y las empresas repartidoras de mensajería y encomiendas también resultaron afectadas por las torrenciales lluvias.

Para Eduardo Cadena, director del Centro de Estudios y Análisis de la Cámara de Comercio de Quito, todavía es temprano para cuantificar las pérdidas materiales de Quito. No obstante, Cadena calcula que el Municipio tiene que invertir unos USD 570 millones en vías, alcantarillado, obras de prevención, etc. Lea el informe completo en Revista Líderes o en www.revistalideres.ec

Suplementos digitales