El Gobierno anunció la mañana de ayer que no cambiará la Resolución 18 del Comité de Comercio Exterior (Comex), que incrementa los aranceles para los CKD (partes y piezas para armar un auto).
El documento, vigente desde inicios de septiembre, establece un arancel de importación de entre 5 y 18%. No obstante, hay un descuento de la tasa, según el porcentaje de partes nacionales.
“Estos días hemos hecho un análisis detenido sobre el comportamiento que tuvieron las ensambladoras. Todas subieron los precios (de los autos) entre el 5 y el 7%, lo que significa que recuperaron en gran medida el arancel que pagan por importación de los CKD. Por eso, la resolución no tiene que ser cambiada”, señaló el viceministro coordinador de la Producción, Mauricio Peña.
Hasta la tarde de ayer, las ensambladoras desconocían del anuncio, pero al ser consultadas por este Diario aseguraron sentirse preocupadas por una decisión de este tipo. Según Patricio Sánchez, presidente de la Cámara de la Industria Automotriz del Ecuador (Cinae), todavía se está negociando con el Régimen “para llegar a un articulación de la Resolución 18 del Comex”.
La meta de los industriales es que al tiempo que se apliquen los nuevos aranceles a los CKD también se haga un descuento por la incorporación de componentes nacionales en el ensamblaje.
Esto ya lo establece el documento de comercio exterior, pero para la aplicación del descuento se da un plazo hasta el próximo diciembre. Los ensambladores rechazan este procedimiento y por ello la semana pasada anunciaron la paralización de las actividades en las fábricas del país.
El viernes, el gremio de armado de autos indicó que no había desaduanizado la mercadería. Hasta el cierre de esta edición se desconocía si los ítems ya habían salido de los puertos del país.
El Gobierno aseguró que recomendó a los importadores que desaduanicen los productos que mantienen en el puerto y que no hay razón alguna para paralizar las actividades de las fábricas.
Mientras tanto, en el mercado ya empieza a escasear los modelos ensamblados por Maresa, Ómnibus BB y Aymesa. El Kía Río Stylus, fabricado por esta última firma no estará disponible en los concesionarios hasta el 2012.
En los puntos de venta de las camionetas Mazda BT 50, ensambladas por Maresa, no hay ‘stock’. Sus vendedores aseguran que la fábrica se encuentra paralizada y que esta situación podría durar días o, incluso, meses.
Por su parte, las concesionarias de Chevrolet, que tienen vehículos armados por Ómnibus BB, señalaron que modelos como el Grand Vitara 5 puertas podría subir de precio en un 10% en las próximas semanas por el aumento de aranceles a los CKD.