La compra de un disco original es complicado, pero posible. Jonathan Cisneros, un joven de 32 años, tiene una colección de más de 300 CD legítimos de casas musicales, especialmente de rock en español.
Desde los 15 años ha invertido cerca de USD 7 000 en su compilación de música. Calcula que ha gastado un promedio de USD 20 por disco, aunque por algunos álbumes pagó más de 100.“No ha sido fácil realizar mi colección, ya que en el país es muy escasa la venta de CD originales”. No obstante, dice que las tiendas especializadas se han dado modos para complacer los pedidos de los clientes y aficionados.
Por lo general, Cisneros compra en varias tiendas especializadas de los centros comerciales El Espiral y El Caracol, en Quito. También visita locales como Musicalísimo, Metrópoli (Mi Comisariato) y Megamaxi.
En la parte baja del centro comercial Espiral, en la avenida Amazonas de Quito, está Marea Negra. Sus propietarios son Juan, Santiago y Byron Suntaxi. Estos tres hermanos amantes de la música abrieron este local hace ocho años por afición.
El lugar no es más grande que una habitación matrimonial. En las paredes hay grandes estanterías con decenas de discos compactos, DVD y LP. A simple vista, parece un local solo para amantes de música rock.
Pero mirando bien se encuentran grades clásicos de Raphael, Julio Jaramillo, música electrónica y también nacional.
Según Juan, la tienda se especializa en rock, pero también se importa música para coleccionistas de todos los géneros. Ellos traen los CD y DVD desde Alemania, España, Italia, Inglaterra, Argentina, Brasil y otros países.
Al mes importan 300 discos en promedio, la mitad de ellos ya están vendidos bajo pedido, para lo cual se anticipa un 30%.
El disco más caro que han comercializado es una colección de LP de la banda Héroes del Silencio, el cual se vendió en USD 275. Trajeron 15y les queda solo uno. “La gente que aprecia la música y que la respeta compra discos originales”, comentó Juan.
A esta tienda acuden adolescentes que reunen de dólar en dólar para comprar el CD o DVD. También médicos, abogados y otros profesionales que gastan lo que sea necesario por un disco original.
Además, según los hermanos Suntaxi, las disqueras también han buscado formas para atraer a los clientes. Una de ellas es la producción de LP. Estas ediciones atraen al comprador porque no se pueden piratear. Muchas tienen incluido un disco compacto o un DVD.
La Corporación Favorita, a través de Megamaxi, vende 1500 discos por mes. Su comercialización se inició en el 2005 con DVD y en el 2006 con CD.
Según la entidad, se incorporó la venta de música porque apoya las leyes del Instituto Ecuatoriano de Propiedad Intelectual (IEPI). Los discos provienen básicamente de México y Argentina.
Musicalísimo es la cadena más grande del país y se dedica únicamente a la venta de discos originales. Esta tienda, que en la actualidad tiene ocho locales en todo el país, abrió sus puertas en Quito en 1980 con la venta de LP. En 1994 empezó a comercializar CD y DVD originales.
Es el único local especializado que ha sobrevivido a la piratería. El resto quebró hasta el 2007. En la actualidad, se encuentra en el ‘Top of Mind’ de las tiendas especializadas de música a escala mundial.
Según Felipe Ribadeneira, subgerente de Musicalísimo, esta empresa se mantiene en el mercado porque invierte en tecnología de punta. Además, está en las redes sociales, en la Internet, tiene personal capacitado, renueva constantemente sus productos e invierte en publicidad. Ribadeneira cree que no hay nada como tener un disco original.