El Ecuador entrará en una nueva etapa dentro de su historia petrolera a partir del 28 de noviembre próximo.
Para esa fecha, el Gobierno anunció la XI Ronda Petrolera, donde saldrán a licitación 16 bloques ubicados en el suroriente del país, en las provincias de Morona Santiago y Pastaza.
Estos bloques, que tienen una extensión de 200 000 hectáreas cada uno, fueron inicialmente explorados en los años 80, pero no llegaron a producir.
En la actual administración, 60 técnicos del Ministerio de Recursos No Renovables se dedicaron durante 17 meses a levantar información sobre la potencialidad de la zona.
De estos estudios se determinaron reservas estimadas de entre 369 millones de barriles en un escenario pesimista, hasta 1587 millones en un escenario optimista. Es decir, un 80% adicional a las reservas de crudo que dispone al momento el Ecuador.
El ministro de Recursos No Renovables, Wilson Pástor, señaló que la producción de los primeros barriles de la zona podría obtenerse a partir del 2017, luego de cuatro años de exploración.
De los 16 bloques petroleros, tres serán explotados por compañías exclusivamente estatales en asociación con Petroamazonas y los 13 restantes recibirán ofertas de empresas privadas y estatales.
En el suroriente ecuatoriano, están identificados 21 bloques, pero cinco de ellos no saldrán a licitación por falta de personal negociador y falta de acuerdos con las comunidades afectadas por la futura explotación petrolera.
Dentro del proceso de licitación, las empresas estatales y privadas interesadas en presentar ofertas sobre los bloques deberán hacerlo hasta el 30 de mayo próximo. Luego, estas serán negociadas con un equipo de la Secretaría de Hidrocarburos.
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De darse una negociación exitosa, la firma de los contratos está prevista para septiembre del 2013.
Los contratos que se firmarán para la explotación de los bloques del suroriente tendrán la modalidad de prestación de servicios con tarifa.
Es decir, a la empresa que explote petróleo en esas áreas se le pagará un tarifa fija por cada barril, similar a lo realizado con la renegociación de los contratos petroleros, en el 2010.
Sin embargo, el nivel de rentabilidad de las empresas participantes ya no será del 15% como en aquella época sino del 25%, por el riesgo que asumen las empresas al hacer exploración en el suroriente.
El representante del Foro Petrolero, Jorge Pareja, indicó al respecto que el sistema de pago de tarifas no es un incentivo para que empresas internacionales participen.
Ello, debido a que asumen todo el riesgo de la exploración y exploración y tienen como paga únicamente una tarifa fija.
Indicó además que no se sabe cómo se calculará la tarifa ya que no se tiene información completa de los bloques del suroriente.
Respecto a la tarifa, Pástor señaló que será flexible, de acuerdo con el nivel de producción de cada bloque y las reservas que encuentren las empresas.
Los contratos a firmarse tendrán un plazo de cuatro años para exploración y 20 para explotación.