El ministro de Defensa, Javier Ponce, respaldó a los marinos que dirigieron Petroecuador y que no acudieron a la Contraloría el mes pasado.
La entidad citó en enero pasado a 172 miembros de la Armada, quienes trabajaron en Petroecuador entre el 2007 y el 2010, para que escuchen los resultados provisionales del examen especial que se hizo por el pago de sus liquidaciones y reliquidaciones.
La Contraloría inició el examen porque Petroecuador desembolsó más de USD 402 000 en liquidaciones y reliquidaciones por alzas salariales al personal naval, las cuales llegaron a USD 22 000 por cada miembro de la Marina que laboró en la petrolera.
Sin embargo, Martha Monar, la auditora de la Contraloría, comunicó que el personal de la Armada se había “negado a recibir las notificaciones”, en un oficio enviado a la viceministra de Defensa Nacional, Rosa Mercedes Pérez, el 25 de enero pasado,
Monar explicó en la misiva que el día anterior, en una audiencia con los marinos, se presentó el ex presidente de Petroecuador, contralmirante Luis Jaramillo, quien le manifestó que llegó a hacerse presente para cumplir una disposición superior “pero que no va a recibir el oficio de comunicación de resultados provisionales”.
Según Monar, Jaramillo añadió que coordinaría con todo el personal naval que trabajó en Petroecuador, para que hicieran lo mismo, “contraviniendo en forma indisciplinada” la disposición de las autoridades militares.
Frente a esos hechos, Ponce aclaró ayer que hubo solo un problema de información, ya que la Contraloría hizo una convocatoria en un plazo muy corto. Y añadió que “de ninguna manera hay una actitud de rebeldía de los miembros de la Marina”.
Según Ponce, sí se presentarán a la lectura de los informes porque están muy claros en su inocencia.