Empleadores de varios sectores productivos mostraron su preocupación por los efectos que puede traer a las empresas el incremento del 10,6% del salario básico.
El pasado 29 de diciembre el Gobierno anunció que el sueldo pasaría de USD 264 a USD 292. Este monto rige a partir de hoy. Sobre este se aplicará también un porcentaje extra en 22 sectores productivos del país, cada uno con subtipos de actividades.
En el área textil, donde según la Asociación de Industrias Textiles del Ecuador (AITE) laboran 40 000 personas, el mínimo que reciben quienes realizan tareas operativas es USD 292,58, mientras que las personas que desempeñan tareas de jefatura ganan al menos USD296,38.
“Para el incremento se tomó en cuenta un factor general de productividad (5,43%), lo cual llevó a una elevada subida de sueldo. La productividad no es la misma en todos los sectores. No creo que vaya a haber reducción de empleos, pero el sector podría crecer menos en el nuevo año”, explicó Javier Díaz, presidente de la AITE.
Los representantes de otros sectores, como el floricultor, creen que los efectos podrían ser graves. Ello debido a que en esta actividad la mano de obra representa el 50% del costo de producción.
“Cualquier incremento es un golpe para este sector debido a que mucha gente gana el salario básico. En la floricultura trabajan 44 000 personas y considero que podría haber una caída del 5% de la mano de obra”, señaló el exportador de flores, Gino Descalzi.
El empresario dijo que debería considerarse que a más del sueldo ellos dan a sus empleados la alimentación y el transporte, por lo que sus gastos son mayores.
Por otro lado, los microempresarios sienten menos presión porque los empleados de estas firmas son familiares y sus ingresos dependen de lo que se gana. Wilson Lozano, presidente de la Cámara Nacional de la Microempresa, explicó que el 10% de los empleados de las 7 800 firmas afiliadas es externo a la familia y, en esos casos, sí habría impacto por el alza.
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