Los padres de familia realizan compras de útiles escolares en Super Paco para el segundo quimestre en la Sierra. Las clases empezarán el 1 de septiembre. Foto: Paúl Rivas / EL COMERCIO.
A dos semanas de finalizar las vacaciones escolares en la Sierra, las papelerías registran un mayor movimiento de clientes, de cara al regreso a clases que será el 1 de septiembre. Cuando termina el primer quimestre, los establecimientos educativos particulares ya suelen enviar la lista de útiles para el próximo período.
En las dos últimas semanas, los padres de familia acuden en mayor número a las papelerías para adquirir los útiles escolares en busca de los precios más asequibles del mercado.
Sin embargo, las ventas en estos locales registran un menor dinamismo durante esta temporada comparado con igual período del año pasado. Las razones pasan por la situación económica y política del país y la implementación de las sobretasas arancelarias del 45% a productos como el papel, las tintas, marcadores, tijeras, pinturas acrílicas, entre otras.
En el segundo factor se ha reflejado un incremento de precios de productos importados, los cuales han perdido espacio en las perchas de las papelerías.
María José Andrade, madre de familia de un niño que está en prebásica, buscó el viernes pasado cotizaciones para la lista de útiles escolares. Cuenta que la caja de colores de 24 piezas de la marca alemana que siempre compra cuesta ahora USD 6, mientras que el año pasado estaba en 3,90.
En los productos nacionales como cartulina, goma y témperas no ha visto variación considerable. En promedio estos artículos están a USD 1,6 dependiendo de la cantidad, por lo que prefirió adquirir estos últimos por el menor costo.
Ángel Segura, gerente general de la papelería Dilipa, menciona que el entorno económico del país se ha reflejado en una reducción de sus ventas en esta temporada. Registra una facturación de USD 60 000 cuando en esta misma fecha del año pasado sus ventas bordeaban los USD 80 000.
Además, las salvaguardias influyeron para que la compañía redujera sus importaciones de los productos antes mencionados en un 20%, desde Perú, Colombia, México y China.
El empresario también comenta que en el local de Ibarra, sus ventas disminuyeron porque la gente prefiere comprar las listas de útiles en Ipiales (Colombia), que son más baratas por la devaluación del peso colombiano frente al dólar.
Su estrategia ha sido fortalecer las secciones con mayor cantidad de producto nacional como cuadernos, colores, esferos y lápices, además de aplicar descuentos en pagos en efectivos o tarjetas de crédito desde el 10%. Además, por la compra de listas escolares que sobrepasen los USD 30 obsequia desde bolígrafos hasta cartucheras.
La cadena Súper Paco espera que pase la temporada de compra de materiales escolares para realizar una evaluación y ver si existió incremento o reducción de ventas. Las compras de útiles en los establecimientos públicos recién empezarán el próximo mes. Sin embargo, Paúl Cárdenas, gerente de Mercadotecnia, dice que están conscientes de que los padres de familia prefieren productos que les signifique un ahorro en sus presupuestos.
Por eso, para esta temporada solo prevé un crecimiento del 6% de sus ventas, similar al registrado en años pasados.
Como estrategia, indica Cárdenas, se abrieron nuevos puntos de venta a escala nacional, además de abastecer la cadena de locales con más productos nacionales como reglas, colores y cuadernos. Este último es el que más se vende y cuesta desde 65 centavos.
Súper Paco ofrece planes de pago con tarjeta de crédito a 3, 6 y 12 meses sin intereses, con dos meses de gracia. Asimismo, según el monto de las compras ofrece descuentos del 10% para compras en Etafashion, por ejemplo.
Los descuentos y promociones se presentan en las papelerías del centro de Quito, aunque ahí también se observa un bajón en las ventas. En estos locales, el producto nacional representa entre el 60 y 70% de su oferta, según sus dueños.
Cecilia Piedra, propietaria de la Papelería y Librería Popular, cuenta que desde julio pasado las ventas de útiles representa n el 50% de sus ingresos totales. El año pasado llegaba al 80%.
En parte, esa situación obedece a las protestas y marchas en el sector del Palacio de Gobierno, que le obligaron a cerrar el almacén por las tardes y eso redujo las ventas.
La oferta comercial de esta papelería se concentra básicamente en cuadernos, carpetas, esferos, marcadores, lápices de producción nacional, que tienen buena aceptación en el mercado. En cambio, las marcas extranjeras como Pelikan o Stadler subieron de precio. Por ejemplo, las témperas de la primera marca costaban el año pasado USD 1,20 y ahora se incrementaron a 1,80.
La propietaria de este local, que tiene tres sucursales en el norte y sur de Quito, ofrece descuentos del 10% para pagos en efectivos y obsequia membretes o cartucheras.
Además, indica que las listas de útiles tienen un precio en promedio desde USD 20 con materiales locales, pero varía según la entidad educativa.