Por la pandemia del covid-19 se perderían 25 millones de empleos en el mundo, según la OIT

En un estudio, la OIT prevé, además, prevé un aumento exponencial del subempleo y la pobreza labora. Foto: AFP

En un estudio, la OIT prevé, además, prevé un aumento exponencial del subempleo y la pobreza labora. Foto: AFP

En un estudio, la OIT prevé, además, prevé un aumento exponencial del subempleo y la pobreza labora. Foto: AFP

El impacto económico global que ha causado la pandemia del nuevo coronavirus provocaría que el desempleo aumente en casi 25 millones de personas a escala mundial, según un estudio de la Organización Internacional de Trabajo (OIT), publicado este 18 de marzo del 2020. Sería peor que los 22 millones de empleos perdidos por la crisis financiera de 2008 y 2009.

Ese es el peor de los tres escenarios proyectados por el ente, los otros dos estiman que se pierdan empleos entre 5,3 millones (efecto bajo) y 13 millones (efecto medio). Todo dependerá del nivel de reacción y acción de las autoridades de los distintos países.

Los datos corresponden al informe titulado COVID-19 y el mundo del trabajo: Consecuencias y respuestas.

En ese documento, la OIT prevé, además, un aumento exponencial del subempleo, ya que las consecuencias económicas del brote del virus se traducen en reducciones de las horas de trabajo y los salarios.

En los países en desarrollo, es posible que las restricciones al movimiento de personas (por ejemplo, de los proveedores de servicios) y mercancías en esta ocasión anulen el efecto amortiguador que allí suele tener el empleo por cuenta propia.

Al caer el empleo también caen los ingresos de los trabajadores. El estudio estima que las pérdidas de ingresos se situarán entre USD 860 000 millones y USD 3,4 billones a finales de 2020. Esto se traducirá en caídas en el consumo de bienes y servicios, lo que a su vez afectará a las perspectivas de las empresas y las economías.

También se prevé un importante aumento de la pobreza laboral, ya que “la presión sobre los ingresos resultante de la disminución de la actividad económica tendrá un efecto devastador para los trabajadores que se encuentran cerca o por debajo del umbral de la pobreza”.

La OIT estima que entre 8,8 millones y 35 millones de personas más estarán en situación de pobreza laboral en todo el mundo, frente a la estimación original para 2020 (que preveía una disminución de 14 millones en todo el mundo).

El organismo recomienda implementar medidas basadas en tres pilares: proteger a los trabajadores en el lugar de trabajo, estimular la economía y el empleo, y sostener los puestos de trabajo y los ingresos.

Esas medidas incluyen la ampliación de la protección social, el apoyo para mantener el empleo (es decir, el trabajo a jornada reducida, las vacaciones pagadas y otros subsidios) y la concesión de ayudas financieras y desgravaciones fiscales, en particular a las microempresas y pequeñas y medianas empresas.

“Ya no se trata sólo de una crisis sanitaria mundial, sino también de una importante crisis económica y del mercado laboral que está teniendo un enorme impacto en las personas”, dijo el director general de la OIT, Guy Ryder.