Desde enero del 2013 empezará a regir la nueva reforma tributaria que, entre otras cosas, grava con el 12% de IVA a los servicios financieros.
El Gobierno dijo que ese impuesto lo pagará la banca privada, pero en la práctica lo harán los mismos clientes de las instituciones financieras.
Un ejemplo. Si usted pagaba USD 0,50 por retirar efectivo del cajero automático de otro banco, la totalidad de ese pago entraba a las bóvedas del banco. A partir de enero del próximo año, USD 0,45 entrarán al banco privado y los 0,05 restantes pasarán a manos del Fisco. ¿De dónde salió la plata para pagar por el servicio del banco y también el 12% de IVA? Del bolsillo del cliente.
Para que eso suceda, el Ejecutivo hizo dos movimientos. Primero, envió un proyecto a la Asamblea para reformar, entre otras cosas, la Ley de Régimen Tributario Interno, donde constaba que los servicios financieros estaban gravados con tarifa cero de IVA.
A través de la reforma eliminó a los servicios de ese beneficio, por lo que a partir de enero del próximo año pasarán a pagar el 12%.
Y esta semana, la Junta Bancaria emitió una resolución fijando las tarifas máximas que los clientes pagarán, a partir del 1 de enero del 2013, por 33 servicios financieros, entre ellos, el retiro de efectivo a través del cajero automático.
La resolución de la Junta Bancaria redujo las tarifas máximas para que los bancos puedan aplicar el 12% de IVA sin afectar el precio que venía pagando el cliente hasta este año. Sin embargo, el dinero para pagar el impuesto del IVA saldrá del bolsillo del propio cliente, no de la banca.