El comercio electrónico es una de las oportunidades para generar empleo en Ecuador. Foto: Pixabay
Un estudio de la Organización Internacional de Trabajo (OIT) identificó al menos ocho sectores económicos con potencial para crear empleo y emprendimientos en las ciudades de Quito y Guayaquil, como una vía para la reactivación económica en medio de la pandemia.
Las oportunidades para la población nacional, migrante y refugiada venezolana afectada por la crisis se encuentran en las actividades de comercio electrónico, desarrollo de software, internet de las cosas, educación básica, transporte verde y saludable, atención sanitaria y agricultura (cultivos de café y cacao), según el informe publicado el pasado 28 de octubre del 2020.
“El estudio ha identificado los ocho sectores económicos con mayor generación de empleo (juntos suponen un 87,2% del empleo pleno nacional); ha evaluado el riesgo de pérdida de empleo por la crisis sanitaria en estos sectores y ha identificado los tres subsectores con mayor potencial de crecimiento pos-covid-19”, sostuvo Elena Montobbio, Directora Adjunta de la Oficina Andina de la OIT.
La OIT señala que a pesar de una inminente recesión económica global, algunos sectores económicos se han visto fortalecidos. Esto se debe a que la crisis sanitaria trajo cambios drásticos en las tendencias de consumo y aceleró la digitalización de múltiples sectores, lo que tiene un alto impacto en las perspectivas de empleo y emprendimiento.
Existen segmentos que se han visto beneficiados de forma muy rápida como resultado de las medidas de mitigación de la pandemia, como es el caso de los productos sanitarios (mascarillas, gel antibacteriano), compras de comida a domicilio o el entretenimiento on-line.
Sin embargo, se estima que el crecimiento de dichos sectores se reducirá a niveles semejantes previos a la crisis sanitaria una vez se haya finalizado el período de distanciamiento social.
A mediano plazo se identificaron actividades que saldrán beneficiadas porque han podido posicionarse o romper barreras digitales, entre otros factores. En este grupo se encuentra el comercio electrónico, educación en línea, y herramientas para el teletrabajo.
A largo plazo se estima que los hábitos de consumo concentren las preferencias en bienes y servicios relacionados con la familia, la salud, la seguridad y la vivienda. Por estas razones se proyectan como sectores potenciales a la telemedicina, servicios para atender la seguridad (patrimonial, salud), y la alimentación saludable.
El estudio muestra que algunos de estos sectores son nuevos en la economía ecuatoriana y las habilidades necesarias para emprender o emplearse en estos son escasas. En estos casos -recomienda- se deberá dar prioridad a aquellos donde el desarrollo de habilidades para el empleo o emprendimiento sea rápido o pueda apalancarse en formaciones o experiencias previas.
La OIT expone que la población venezolana es especialmente vulnerable. Según información proporcionada en entrevistas con organizaciones de venezolanos en Ecuador, los trabajadores extranjeros a menudo son los primeros en perder su empleo. Esto se debe a que en la mayoría de los casos este es informal, carece de las indemnizaciones por desahucio, término de contrato antes del plazo convenido o despido intempestivo, entre otras prestaciones contempladas por la ley.
La viceministra de Trabajo y Empleo, Sharian Moreno, comentó que la atención focalizada en estos sectores permitirá agregar valor a la matriz productiva del Ecuador, por cuanto en estas líneas de trabajo prima la especialidad y no el bajo costo de producción. Una intervención en estas áreas dinamizaría el modelo tradicional de la matriz productiva ecuatoriana, potenciaría actividades económicas en las que apenas se ha incursionado y ofrecería alternativas para promover el empleo formal.