La competencia por ofrecer créditos a los microempresarios en las áreas rurales aumenta en Guayaquil.
La fundación D-Miro se ha convertido en un banco. Para aumentar el número de clientes, ahora apoya a los emprendedores y microempresarios de las zonas marginales del Litoral.
Todo empezó en 1997, cuando se creó el programa de microfinanzas D-Miro. Tenía 80 clientes que se beneficiaban con préstamos para sus pequeños negocios. En el 2006, la base de datos sumó 11 000 usuarios y desde el pasado 17 de julio, empezó a operar como entidad bancaria con 32 000 clientes y una cartera de USD 31 millones.
El objetivo es llegar a las familias que viven en la Isla Trinitaria, Fortín, Voluntad de Dios, entre otros. Las nuevas reglas del sistema financiero obligaron a sus administradores a escoger entre un banco, cooperativa o sociedad financiera para poder seguir con sus operaciones.
Carlos Egas, gerente del banco D-Miro, sostuvo que la mejor opción fue crear un banco, ya que podrán ofrecer más servicios a sus clientes como libretas de ahorro, inversiones, entre otros. “El análisis sugería que se constituya un banco. El ambiente jurídico es el apropiado porque se podrá mantener el aporte de los accionistas que es clave para entregar los créditos”.
Las libretas de ahorro y depósitos a plazo se empezarán a ofrecer en el banco dentro de tres meses.
Su estrategia de buscar clientes será idéntica a la que aplicaban cuando eran fundación. Es decir, los empleados visitarán los domicilios de los potenciales clientes para ofrecer los créditos y los otros servicios.
Según Egas, se buscarán personas que no tengan acceso a la banca tradicional. “En la evaluación se tomará más en cuenta la intencionalidad de pagar. Mientras que la capacidad económica que un usuario tenga servirá para fijar el monto del préstamo, que va desde los USD 300”.
[[OBJECT]]En este segmento también operan los bancos Solidario, Procredit, Finca, CrediFe, Capital y el Banco Nacional de Fomento.
D-Miro espera sumar 45 000 clientes hasta finales de este año y se proyecta a 100 000 en el 2015. Su centro de operación será en Guayaquil pero también contará con oficinas en Durán, Milagro, Playas, Libertad, Machala, Quevedo, Portoviejo y Manta.
Otra entidad que también se estrena como banco es Coopnacional, que antes operaba como cooperativa de ahorro y crédito.
Jorge Omar Jácome, gerente de esta institución, dijo que su oferta principal serán los microcréditos y que su objetivo se dirigirá a apoyar a sus clientes en sus negocios. “Por el momento operaremos solo en Guayaquil y luego nos ampliaremos a otras ciudades”.
Con estas dos entidades, el mapa bancario tendrá 27 participantes que buscarán una parte del pastel financiero que hasta julio de este año generó una ganancia de USD 226,5 millones.
Según los registros de la Superintendencia de Bancos y Seguros, el total de activos bancarios sumaron USD 22 218 millones con depósitos acumulados de USD 17 643 millones.
Sin embargo, la entrada de nuevas entidades no preocupa a los banqueros. Mauricio Salem, gerente regional del Banco del Austro, dice que la competencia es buena y que cada entidad podrá ofrecer sus productos y servicios a los mercados que pueda llegar.