El presidente de la Organización de Acción Social Cóndor Mirador (Ascomi), Lusi Sánchez, defendió la medida adoptada por los trabajadores del campamento Mirador, que se tomaron las instalaciones que son de propiedad de la compañía Ecuacorriente. Esto se efectuó el sábado a las 06:30 de la mañana, según confirmó la propia compañía.
Según la empresa, las instalaciones fueron ocupadas por alrededor de 150 trabajadores. “Lamentamos que intereses particulares provoquen el caos e insistan en retrasar el avance del proyecto Mirador y de la minería metálica en el Ecuador”, explicó en un comunicado.
Sanchez, en efecto, confirmó la ocupación, sin embargo, la justificó argumentando que se debió a que se “han violado los Derechos Humanos de llos trabajadores”. El dirigente explicó que los trabajadores, hace varios días, habían elegido a su nuevo Directorio de representantes, y fueron legalizados, según Sánchez, en el Ministerio de Relaciones Laborales.
“La empresa les pidió que señalen qué cosas estaban mal, que cosas quieren que cambien. Y eso no les gustó. A los miembros de este Directorio les llamaron por teléfono y les dijeron que estaban despedidos, incluso a algunos ingenieros técnicos. En total fueron 11 los despedidos. Eso ocurrió el pasado viernes (10 de mayo del 2014) en la tarde, al terminar la jornada laboral. Por eso ayer (sábado 17 de mayo del 2014),a las 06:30, entraron y se tomaron el campamento, por esta injusticia”.
Aunque no confirmó la cifra de empleados que se encuentran en las instalaciones, aseguró que la nómina es de unas 400 personas y que ninguna ha salido. Para el lunes 19 de mayo del 2014 está prevista una audiencia en el Ministerio de Relaciones Laborales.
“No sé qué tanto puedan negociar. Hemos sido intimidados y amedrentados porque sabemos sobre los atropellos que pasa en la zona”.