Ivonne Vega cuenta que tuvo que dejar el sector público pese a su alto desempeño y sus títulos.
‘Forjé mi carrera desde hace 21 años en el entonces Ministerio de Trabajo y Recursos Humanos que luego pasó a llamarse Ministerio de Trabajo y Empleo y después Ministerio de Relaciones Laborales.
Llegué con el título de economista graduada en la Pontificia Universidad Católica del Ecuador (Puce) y comencé a trabajar en la Dirección de Planificación.
Luego de diez años, decidí emprender una segunda carrera y comencé a estudiar Derecho en la Universidad Central. Trabajaba en el Ministerio de 8:00 a 16:30 y estudiaba de 17:00 a 21:00 todos los días.
En el 2005 me gradué de abogada de jurisprudencia y cuatro años después seguí un diplomado superior de Migración y Desarrollo en la Facultad Latinoamericana de Ciencias Sociales .
Tengo las certificaciones del Senescyt que comprueban cada uno de mis títulos.
Mi desempeño en el Ministerio de Relaciones Laborales fue excelentes. Las tres últimas evaluaciones de las cuáles me notificaron (muestra los documentos) tienen esas calificaciones.
La primera tiene fecha del 13 de agosto del 2009 y obtuve una calificación de 100 sobre 100, que equivale a excelente.
En la segunda, del 31 de marzo del 2010, obtuve una calificación de 95,8 sobre 100 que también es excelente.
Finalmente, en la evaluación el 9 de agosto del 2010, también tuve una calificación excelente de 100 sobre 100.
Pero el 28 de octubre me entregaron una acción de personal hacia el mediodía en el que me notificaban de la compra de mi renuncia. A la 18:00 ya habían depositado en mi cuenta el monto de la indemnización.
No entiendo cómo, pese a tener tres títulos, ser una profesional de categoría siete, y pese a mis excelentes evaluaciones me sacaron de mi puesto.
Además tengo un certificado de la Contraloría, vigente hasta el 11 de noviembre de este año, en el que la entidad da fe de que nunca he tenido ninguna glosa ni algún otro tipo de responsabilidad. Ni siquiera he tenido una acción de personal por atraso.
Mi expediente está completamente limpio. Entonces ¿de qué estamos hablando? Me molesta que las autoridades digan que nos despidieron por ser corruptos sin una comprobación, ni denuncias u otro tipo de justificación o documento que certifique esa afirmación.