Entrevista a Luis Jaramillo, analista financiero
¿Qué medidas se recomiendan para evitar la expansión del sobreendeudamiento en el país?
Antes de emitir normas de regulación, primero hay que ver que estas no afecten al fortalecimiento que ha venido ganando la banca en los últimos años; y, segundo, que no se desacelere la economía. En el país es muy complicado tomar medidas a escala macroeconómica, que cambien los rasgos del consumo de los hogares. El gasto y la falta de ahorro son hechos ya arraigados a la cultura de los ecuatorianos.
¿O sea que no hay herramientas suficientes para detener la escalada de deudas?
Hay dos herramientas que se pueden aplicar para controlar el excesivo endeudamiento. La primera es fortalecer el sistema de información crediticia de la Central de Riesgos y de los burós. La segunda, y que debe ir de la mano de la anterior, es la limitación de los cupos en las tarjetas de crédito. Al bajarlos, se obligará a que las personas estabilicen su situación de consumo y se asienten en la realidad de cuál debe ser su nivel de gasto. Así se corta el efecto ‘bola de nieve’.
¿Las regulaciones deben ser más estrictas con las tarjetas de crédito?
Las tarjetas no son dañinas en tanto y en cuanto sean bien controladas por las emisoras, y administradas en buena forma por el titular. Además, las tarjetas de ciertas instituciones han ayudado a varios sectores a bancarizarse. Hay una población de ingresos de hasta USD 700 que antes no tenía acceso a una tarjeta de crédito. Y ahora, con cupos controlados, ha podido organizarse en el manejo de sus economías.
Al bancarizarse, las personas tienen acceso a un mejor nivel de vida. Antes no podían comprar una cocina, ahora lo pueden hacer. Por tanto, debe ser una política estatal que la población se bancarice, porque es positivo.
Pero es un buen negocio ofrecer tarjetas de crédito…
No pienso que las instituciones financieras estén concediendo créditos sin un análisis profundo. Después de la crisis financiera de 1999, el sistema aprendió la lección y tomó medidas de fortalecimiento patrimonial, en su riesgo operativo y crediticio.
Sin embargo, no está por demás revisar los procedimientos y considero que la debilidad del sistema es la falta de una base de información fiable. Los bancos deben trabajar en mejorar sus sistemas, deben invertir un poco más en garantizar que la información que manejan es certificada. También deben imponer más límites -aunque entiendo que así lo hacen- para la concesión de un crédito.
¿Es viable controlar el consumo vía tasas de interés?
No sé hasta qué punto se pueden ajustar más las tasas de interés. Ver esta opción como una política de control podría ser negativo, porque si se sube la tasa para controlar al consumidor, el banco se va a ver incentivado a dar más créditos porque va a ganar más. En cambio, si se baja la tasa, se desincentiva al banco a que dé crédito, pero se estimula a más clientes a demandarlos.
¿Es suficiente una campaña de concienciación para evitar sobreendeudarse?
Puede haber un esfuerzo gubernamental, pero eso tiene que trasladarse a la educación básica. Hay que hacer campañas publicitarias acerca de cómo cada uno debe saber hasta dónde puede estirar los pies. Hay que saber explicar a la gente qué significa ese dicho. Pero el problema y la solución no es solo de las personas ni del sector privado. El Estado también debe tomar conciencia y dar ejemplo.
HOJA DE VIDA
Luis Jaramillo
Su experiencia. Economista. Consultor. Actual Gerente General de la Calificadora de Riesgos Class International Rating.