La Superintendencia de Telecomunicaciones (Supertel) detectó la caída de llamadas tanto de Porta como de Movistar en distintos sectores de Quito.
A esta conclusión llegó luego de monitorear la calidad de servicio entre enero y julio del presente año. Las mediciones se realizaron en 23 zonas dentro del perímetro urbano, en un área de 116 kilómetros cuadrados.
Los resultados muestran que se presentaron caídas de llamadas de Porta en 54 sectores de la ciudad y en 151 por parte de la operadora de telefonía Movistar.
Se entiende como llamada caída a aquella que termina abruptamente sin que ninguno de los usuarios cierren el canal. Según el experto en telecomunicaciones Hugo Carrión Gordón, esto puede suceder por dos razones. “Que el abonado entre en una zona de cobertura mínima o que haya problema en el cambio de señal entre dos radiobases”.
Las zonas donde se registraron las caídas de llamadas fueron: Centro Histórico, Mariscal, El Girón, Monjas y El Recreo. También hubo fallas en áreas de cobertura como La Kennedy, aeropuerto, Cotocollao, entre otras.
Frente al informe de la Superintendencia de Telecomunicaciones, la operadora Porta resaltó el reducido número de problemas frente a su competidor, lo cual se sustenta en las inversiones en cobertura realizadas durante los últimos cuatro años.
“Hemos invertido USD 900 millones para la instalación de 2 614 radiobases en el país. Nuestra señal llega a 1 300 poblaciones y más de 8 000 kilómetros de carreteras y caminos vecinales”.
Mientras Movistar explicó que en los últimos meses ha instalado 40 radiobases en puntos estratégicos de Quito para mejorar la cobertura. La operadora aclaró que la colocación de equipos no se ha realizado de forma rápida debido a las demoras por parte del Municipio en la entrega de los permisos para su instalación.
Recién a finales de mayo Telefónica comenzó a recibir permisos temporales de instalación hasta obtener las licencias ambientales definitivas. Esta situación es de pleno conocimiento de la Supertel, dijo en un comunicado.