La aprobación de la Ley de Telecomunicaciones movió los tiempos de firma de contrato con las telefónicas privadas. Foto: Archivo/ EL COMERCIO.
El Gobierno ecuatoriano no cumplió su objetivo. Finalmente, los contratos de concesión para otorgar espectro para el despliegue de la red 4G LTE (evolución a largo plazo, por sus siglas en inglés) no se suscribieron el fin del año pasado con Movistar y Claro, como se tenía previsto.
Augusto Espín, ministro de Telecomunicaciones, señaló a este Diario que las negociaciones siguen “avanzando y están negociando los documentos. Esperamos que se cierren en enero (…) Las condiciones más importantes de alguna manera están acordadas”.
“Falta definir un documento claro, que refleje la negociación; eso toma un poco de tiempo (…) las operadoras también deben definir estos temas en juntas de accionistas que se realizan periódicamente, también depende de sus tiempos”, declaró el Ministro.
Espín sostuvo que se encuentran más cerca de llegar a un acuerdo con Movistar, pero que las negociaciones con Claro también están avanzadas.
Por ahora, la Corporación Nacional de Telecomunicaciones (CNT) sigue siendo la única operadora que ofrece este servicio de navegación de banda ancha móvil en el país, que alcanza velocidades promedio 10 veces más rápidas que su red antecesora: la 3G.
Con esta renovada plataforma se potencia el uso de aplicaciones para diversos ámbitos, que van desde el educativo, el industrial y productivo hasta el de entretenimiento.
Asimismo, la suscripción de estos contratos representarán importantes ingresos para el Estado ecuatoriano. De ahí su importancia y premura para su implementación.
José Otero, director para América Latina de 4G Américas, aseguró a través de un correo electrónico que “Ecuador es el único país de América del Sur que no tendrá al menos dos redes LTE ofreciendo servicios comercialmente durante la primera mitad del 2015”.
Otero explica que solo Venezuela se encontraba en una situación similar a la de Ecuador en lo que respecta a la asignación de espectro radioeléctrico para servicios móviles.
No obstante, la adjudicación de una banda de 120 MHz para ofertar servicios de Internet de alta velocidad en Venezuela, durante el mes pasado, viabiliza la entrada de al menos otro operador LTE durante la primera mitad del 2015.
El ministro Espín señaló que entre los factores que impidieron que se llegue a un pronto acuerdo está la Ley de Telecomunicaciones, la cual fue aprobada por la Asamblea Nacional en semanas pasadas y que actualmente está en manos del Ejecutivo.
“Tuvimos la aprobación del proyecto de Ley de Telecomunicaciones y a su vez las negociaciones; eso complicó los tiempos de todo el mundo”; sostuvo Espín.
Otro de los factores que demoró la negociación, según el titular de la Cartera de Estado, fue “establecer un precio justo, tanto para las operadoras como para el Estado”; sin embargo, las cifras todavía se manejan de manera confidencial.
Roberto Aspiazu, presidente de la Asociación de Empresas de Telecomunicaciones (Asetel), señaló que el tratamiento de la Ley de Telecomunicaciones, en la que se establecen nuevos pagos para las operadoras, demoró las negociaciones.
Por su parte, Claro, a través de un correo electrónico, dijo que aspira que el acuerdo se suscriba lo más pronto posible. Mientras tanto, la telefónica ha trabajado durante todo el año pasado en el despliegue de infraestructura y se encuentra “lista” para la implementación de esta red.
Punto de vista
‘La falta de 4G afecta al usuario’
Alfredo Velazco. Representantes de Usuarios Digitales
Los retrasos se dieron, desde mi punto de vista, por la aprobación de la Ley de Telecomunicaciones. Definitivamente a los usuarios nos afecta porque el despegue del 4G no pasa de los 20 000 usuarios a nivel nacional. La operadora pública ha hecho una gran inversión en publicidad, lo vemos por todo lado. Pero hay todavía problemas que se están viendo del lado de cobertura. No existe un despliegue en todo el país. Solo en ciertas zonas de ciudades hay cobertura de 4G. El reto para el 2015 es llegar a un acuerdo con las operadoras.
‘Acuerdo será después del veto’
Paúl Rojas. Exsuperint. de Telecomunicaciones.
Si no está aprobada completamente una Ley de Telecomunicaciones no se puede dar ninguna negociación. Desde mi punto de vista, cualquier decisión que se tomé será después del veto presidencial. Es comprensible que las cosas todavía estén muy inmaduras. La valoración de la banda suele ser uno de los puntos más complicados para llegar a un acuerdo. La nueva ley dictaminará nuevos parámetros y luces para que puedan llegar a un acuerdo final con las telefónicas. El primer interesado en llegar a un acuerdo es el Estado.