Sesión No. 412 del Pleno de la Asamblea Nacional de Ecuador el martes 4 de octubre de 2016. Foto: Flickr
El Pleno de la Asamblea se allanó hoy, martes 4 de octubre del 2016, a las tres objeciones que remitió el Ejecutivo al proyecto de Ley de Incentivos Tributarios para varios Sectores.
Con 94 votos afirmativos y 23 abstenciones, la Asamblea dio paso a la aprobación de las objeciones, luego de intervenciones de los asambleistas Virgilio Hernández, Ramiro Aguilar y Moisés Tacle.
El proyecto plantea algunos beneficios para los sectores de medicina prepagada, transporte, agrícola, entre otros.
Varios sectores productivos solicitaron, durante el tratamiento del proyecto en el Pleno, que se incluya la eliminación del anticipo al impuesto a la renta (IR) en el proyecto de Ley de Incentivos.
La Asamblea no aceptó el pedido, pero incluyó la posibilidad de que el SRI devuelva el pago en exceso. Inicialmente, el costo tributario de la reforma para el Fisco era de USD 63 millones. Pero con el cambio al anticipo el beneficio de la reforma sube a USD 100 millones, según el Servicio de Rentas Internas (SRI).
La directora subrogante del SRI, Paola Hidalgo, dijo hace unas semanas que las devoluciones se harán previa revisión.
“La empresa que pagó en exceso tendrá que pagar como mínimo la tarifa efectiva promedio de los contribuyentes. Si esa empresa está por debajo de ese promedio no le voy a devolver. Si la empresa está por encima del promedio, entonces sí le voy a devolver”.
El proyecto establece, además, beneficios para transportistas.
Las operadoras de transporte público y comercial no considerarán en el cálculo del anticipo del IR el valor de las unidades de transporte.
Otro punto clave de la reforma tributaria, la cuarta en este año, es el cambio de fórmula del impuesto a los consumos especiales (ICE) para productos importados a fin de estandarizar el cálculo a estándares internacionales.
La modificación responde a un pedido de la Unión Europea y tiene el propósito de facilitar la firma del acuerdo con ese bloque, que está prevista hasta fin de año.
La norma también establece mecanismos para descongestionar la salud pública.
Los usuarios que sean afiliados al IESS y que también tengan un seguro particular podrán ser derivados a una casa de salud privada cuando así lo disponga algún hospital público o el IESS. El pago del deducible correrá a cargo de del IESS y el Ministerio de Salud.
Además, el proyecto de reforma plantea como beneficio para las empresas la deducción de los pagos de seguros médicos o medicina prepagada en el impuesto a la renta (IR). El proyecto original planteaba que el beneficio para las micro y pequeñas empresas sea de 100%; mientras que medianas y grandes sea de un 50%, con la condición de que la empresa cubra ese beneficio a toda la nómina.
El Ejecutivo sostiene que “el incentivo tributario debe beneficiar por igual a todos los sectores productivos”, por lo que propone que el beneficio del 100% sea igual para las empresas domiciliadas en el país, con las excepciones, límites y condiciones establecidas en el reglamento.
La Comisión de Régimen Económico se reúne el lunes próximo para tratar el veto.
El legislador independiente Aguilar señaló que es necesaria una depuración del sistema de medicina prepagada y que el proyecto de ley de este sector -cuyo veto espera ser tratado mañana en la Comisión de Salud- era la oportunidad para efectuarlo.