Las bolsas mundiales recuperaron terreno ayer luego del lunes dramático. Sin embargo, pese a los cierres esperanzadores la jornada tuvo fuertes vaivenes que traslucen la confusión de los inversores ante la debilidad de la economía y la situación financiera en Europa y EE.UU., pero tranquilizadas por la Reserva Federal (FED) .
Esta institución anunció que mantendrá sus tasas de interés de referencia en el piso récord de entre 0% y 0,25%, hasta por lo menos mediados del 2013, con el objetivo de “promover la recuperación económica en marcha”. Esta acción es poco usual en la FED.
Esta declaración era esperada con ansiedad en EE.UU., tras la conmoción creada por la rebaja que la calificadora Standard & Poor’s aplicó, el pasado viernes, a la deuda estadounidense, cuyo ‘rating’ pasó de AAA a AA+.
El mensaje de la FED tuvo un mejor impacto que el discurso pronunciado el pasado lunes por el presidente Barack Obama, quien reprendió duramente a Standard & Poor’s por rebajar la nota de la deuda de su país.
Después del mensaje de Obama, Wall Street respondió con una caída de más de 630 puntos, a diferencia de ayer, que tras la declaración de la FED perdió hasta un 1,8% pero luego rebotó hasta marcar casi 430 puntos positivos en el índice Dow Jones de los principales papeles industriales.
La importancia de las bolsas de valores radica en que en estos lugares se concentra la actividad financiera de las empresas del mundo. Si cae una Bolsa de Valores, significa que el valor de las compañías (acciones) disminuye y, por lo tanto, su atractivo para el inversionista también pierde brillo.
Al darse un colapso de las bolsas, como el que ocurrió el pasado lunes, los millonarios capitales huyen y buscan refugio en otros ámbitos más seguros, como el oro, por ejemplo. En consecuencia, las empresas que cotizan en las bolsas sufren contracciones de sus ganancias, lo cual puede repercutir en el empleo.
De todas maneras, más allá de la recuperación bursátil de ayer, la declaración de la FED advirtió que, desde su última reunión, de junio de este año, el crecimiento económico “fue más lento de lo esperado” . Además, dijo esperar que la recuperación marchará a un ritmo todavía más “lento” en los próximos trimestres, respecto de las previsiones que había emitido en el momento de la reunión previa, de mediados de año.
Los temores de una segunda recesión en EE.UU., aunque son rechazados por gran parte de los analistas, recibieron un nuevo impulso en las últimas semanas, cuando el país estuvo a punto de caer en ‘default’ (imposibilidad de pagar la deuda soberana).
Hace una semana Obama firmó la ley que permitió, a último momento, evitar el ‘default’ pero a cambio de enorme recortes al gasto público. La primera tanda acordada entre demócratas y republicanos prevé USD 917 000 millones en ahorros, pero a eso habrá que agregar entre USD 1,2 y 1,5 billones a aplicarse de acuerdo con recomendaciones que debe emitir un comité parlamentario en noviembre próximo.
La calificadora cree que EE.UU. necesita recortar USD 4 billones.
Mientras tanto, en este escenario, la preocupación ahora se cierne sobre los precios del petróleo, que ayer retrocedieron fuertemente otra vez en Londres y Nueva York. En el New York Mercantile Exchange (Nymex) , el barril de West Texas Intermediate (designación del ‘light sweet crude’, referencial para el crudo ecuatoriano, negociado en EE.UU.) terminó en USD 79,30, en baja de USD 2,01 en relación al lunes.
Desde el cierre del 26 de julio, el WTI perdió más de USD 20. Los analistas de varias partes del mundo habían pronosticado que no bajaría de USD 80.