Por más de 15 minutos, el azuayo Daniel Crespo observaba los aretes que buscaba para su novia. Él quería obsequiarle unos pendientes de oro en18 quilates, pero su costo bordeaba los USD 500 en la Joyería Romeo, en el Centro Histórico de Cuenca.
Entonces pensó en aretes de plata, que cuestan en promedio USD 80. Eran de su gusto, pero días después una amiga le indicó otra alternativa. Mediante un catálogo escogió una joya con baño de oro, importada desde Perú. Es una mejor opción, porque se puede pagar hasta a 60 días y el precio no supera los USD 70.
Carlos Rodríguez también estaba buscando anillos de matrimonio, porque se casará en marzo, pero no los quiere en oro. “Hoy, eso es un lujo, por eso compraré los aros en plata o algo que tenga un baño del metal dorado”.
El mercado de las joyas está cambiando y eso lo evidencia la Asociación de Joyerías del Azuay (AJA), que agrupa a 150 joyeros. Ellos registran un 50% menos en sus ventas desde el 2009.
Fausto Ordóñez, representante del gremio, cuenta que al país ingresan –por vía terrestre, aérea y marítima– joyas de Tailandia, India, Panamá, Perú e Italia, sin registro de calidad e información sobre los materiales que contienen. Sin embargo, para que los artesanos puedan exportar sus productos, sí se piden certificaciones de calidad. “Esto evidencia que estamos en desventaja”.
Para el presidente Ejecutivo de la joyería Aurum, José Galarza, mientras el gramo de plata (incluido mano de obra) cuesta USD 2,20, del exterior ingresa en USD 1,60 el gramo. “No es plata pura, sino mezclada con materiales como níquel u otros”.
Los menores precios también se explican porque ingresan joyas de contrabando, que no pagan el 12% por el Impuesto del Valor Agregado, ni el 15% de aranceles.
Estos factores establecen una desventaja para el joyero artesanal, dice Galarza.
De igual forma, la escalada de precios en el mercado internacional, tanto del oro como de la plata, ha cambiado las preferencias de los consumidores, quienes adquieren opciones más económicas. El gramo de oro bordea los USD 35 y con el trabajo del artesano aumenta a USD 60, dice Galarza.
Las nuevas tendencias en el mercado están obligando a los joyeros a buscar nuevas estrategias para competir. Washington Guacho, gerente de Romeo Joyería, ofrece a sus clientes un año de plazo para pagar por las joyas, con las tarjetas de crédito. La compra a crédito se evidencia principalmente en la adquisición de los anillos de compromiso o de matrimonio, en los que las personas son menos proclives a ahorrar.
Guacho reconoce que durante el 2011 las piezas en oro subieron hasta un 80%. Por ello, ha aumentado la producción de joyas de plata y bañadas con GoldField.
Por su parte, el joyero Fausto Ordóñez adecuó una especie de museo en su taller para que los visitantes conozcan las herramientas que usa en la elaboración de una pieza. También, los invita al proceso de fabricación. Explica que transparentar el proceso genera confianza en el consumidor.
Crespo visitó el taller de Ordóñez para ver cómo se elabora una joya. Le pareció importante la dedicación y la calidad, pero no le alcanza para pagar el precio de esas joyas, por lo que optó por comprar bisutería peruana.
La onza de oro está ahora en USD 1 632
La firma US Gold Corp. prevé que los precios del oro llegarían sobre los USD 2 000 durante este año.
El oro cayó el viernes un 1 % por el fuerte retroceso del euro frente al dólar, por la crisis en la UE.
La onza de oro al contado bajó el viernes pasado a USD 1 632, pero registra 5%de avance en el año.
El precio de la plata también cayó el viernes pasado un 2,5% y se ubicó en a 29,51 dólares la onza.