Más de 500 000 jóvenes ecuatorianos, entre 22 y 32 años, cuentan con tarjetas de crédito activas. Este grupo demográfico utiliza esta herramienta financiera principalmente para pagos diferidos, marcando un cambio en el consumo del país.
Más noticias
El 57% de los jóvenes prefiere diferir sus compras a plazos menores a 12 meses, con mayor incidencia entre mujeres casadas (59%).
Por otro lado, los hombres jóvenes manejan mayores volúmenes de crédito, acumulando un saldo total de 680 millones de dólares, frente a los 510 millones de dólares registrados por las mujeres. Así lo señala el último estudio de Equifax: ‘Tarjetas de Crédito, el inicio de la historia financiera de los jóvenes 2024’.
El análisis también destaca cómo los cupos de crédito evolucionan con la experiencia financiera. Al ingresar al sistema, un joven de 22 años tiene un cupo promedio de 500 dólares, que puede alcanzar los 2 500 dólares a los 32 años. Este modelo muestra la importancia de construir un historial crediticio sólido desde el inicio.
Educación financiera para los jóvenes de Ecuador
David Castellanos, docente de la Universidad Andina Simón Bolívar, resalta la importancia del comportamiento de los jóvenes. “El crédito diferido predomina en este segmento, lo que refleja la tendencia de los jóvenes a planificar mejor sus pagos”. Castellanos subraya que esta dinámica recalca la necesidad de una educación financiera adecuada para quienes comienzan su vida financiera.
Según el Banco Central del Ecuador (BCE), el 96% de la población ecuatoriana no ha recibido educación financiera. Es decir, nueve de cada 10 personas en el país jamás recibieron capacitación sobre finanzas.
La falta de conocimiento sobre el manejo de las finanzas personales se da en el país a pesar de que desde el 2013, la Superintendencia de Bancos establece que todas las instituciones controladas por el ente deben desarrollar programas de educación financiera para sus clientes, colaboradores y público en general.