Si visitan un negocio de venta al por mayor de prendas de vestir ¿cómo codificarían esta actividad?
Esa fue la pregunta que Luis Murillo, técnico del Instituto Nacional de Estadística y Censos (INEC), planteó a 38 jóvenes contratados para realizar el censo económico. Este se iniciará el próximo 6 de septiembre en el país.
Siete minutos después de aquella interrogante, William Chila lanzó la respuesta: G464105.
El reto de Murillo es que los empadronadores y supervisores de calidad tengan mayor agilidad, para identificar el código designado para cada actividad productiva. Están impresos en dos folletos de 217 páginas, que deben revisar constantemente.
Entre el lunes y martes últimos, 510 empadronadores, 125 supervisores y otros 125 revisores contratados por la Dirección Regional Litoral recibieron la última fase de capacitación.
Los ejercicios de simulación fueron dictados en las aulas de la Facultad de Administración de la Universidad de Guayaquil.
Los empadronadores debían salir hoy a las calles a recolectar información de pequeñas, medianas y grandes empresas, según la planificación inicial del INEC. Pero deben esperar cinco días más. Mientras tanto, organizarán los formularios y el material que utilizarán en el censo.
El cambio se debe a cuestiones organizativas, se indicó desde el departamento de Comunicación de la institución .
El censo económico se realizará en el país después de 30 años y sus resultados servirán para tener información más desagregada sobre los negocios establecidos.
En el caso de establecimientos pequeños, son sus propietarios o administradores quienes deben responder al cuestionario; en el caso de los negocios grandes, serán encuestados los contadores o directores financieros.
Las preguntas girarán en torno al tipo de negocio, cantidad de personal que ocupa y los gastos en que incurre por remuneraciones.