Un tributo a las exportaciones. Así catalogaron los representantes de este sector al incremento del Impuesto a la Salida de Divisas (ISD) del 2% al 5% , planteado dentro del proyecto de Reforma Tributaria.
El artículo 17 del documento establece que se fijará el ISD sobre el dinero correspondiente a pagos por exportaciones que no ingrese a Ecuador. Los exportadores deberán cancelar el gravamen de forma anual en la forma y plazos que establezca el Servicio de Rentas Internas (SRI).
Álvaro Maldonado, presidente del directorio de la Federación Nacional de Exportadores (Fedexpor), señaló ayer que el sector necesita tener recursos fuera del país para la compra de insumos destinados a la producción de bienes exportables.
“Las ventas al exterior son un mecanismo para mantener la dolarización. Lamentablemente, el Gobierno se ha decidido por el endeudamiento para sostener el modelo económico”, explicó.
Asambleístas afines al Gobierno no comparten estos criterios y aseguran que la fijación del ISD es también un mecanismo para reducir el incremento de importaciones (el 82% de las divisas que salen del país son por importaciones), que puede crear problemas de balanza comercial.
Esta visión es criticada por el sector comercial. Los empresarios dicen que si se han incrementado las importaciones es porque ha existido más liquidez, producto del alto gasto público.