Con el mayor acceso a Internet era cuestión de tiempo que la gente se diera cuenta que los precios en el exterior son mucho menores a los que rigen en Ecuador, pese al impuesto del 5% a la Salida de Divisas y a los costos por el envío de los productos.
Los ciudadanos realizan compras básicamente de ropa, calzado y artículos electrónicos. También de adornos para el hogar, para la oficina, para el jardín, herramientas, frascos con proteínas, etc.
El mayor poder adquisitivo de la población ha ido en aumento, las empresas de ‘courier’ privadas y públicas ofrecen facilidades para la entrega de paquetes a domicilio y existe exoneración de aranceles para compras pequeñas. El resultado de todo esto ha sido más importaciones.
Durante el 2011 las importaciones vía correos rápidos y tráfico postal sumaron USD 151 millones. El año pasado aumentó a 240 millones, aunque esa cifra representó el 4% de las importaciones de bienes de consumo. En los primeros cinco meses del presente año esas compras han crecido 21% frente a igual período del 2013.
Si bien las importaciones que hacen las personas han crecido, aún son pequeñas respecto al volumen total que ingresa al país por los puertos y aeropuertos. Sin embargo, la diferencia está en que las primeras no pagan aranceles desde que se puso en vigencia el sistema de importación 4×4, para los paquetes de hasta 4 kilos y USD 400.
Ahora, con el argumento de que este sistema se viene utilizando para traer mercadería y comercializarla de manera desleal, la industria de textiles planteó al Gobierno que se modifique la norma. Frente a eso, el Régimen anticipó que aplicará cupos y tasas.
La cifras que circulan señalan cupos de USD 1 200 al año y una tasa fija de USD 42 por paquete, como una salida ante la incapacidad de controlar el uso comercial de los productos importados a través del sistema 4×4. Para quienes cumplen la Ley y adquieren productos por Internet para uso personal, el resultado sería un nuevo impuesto.