El consumo local de los estómagos de res, o mondongos, que principalmente se destinan a la preparación de la tradicional guatita, ha mantenido un volumen considerable de importaciones en los últimos cuatro años.
Hasta el pasado octubre ingresaron a los diferentes puertos, en contenedores refrigerados a -18 grados, unas 815 toneladas de mondongo, que en su mayoría proviene desde EE.UU.
Para Augusto Morán, chef ejecutivo del Hotel Ramada (Guayaquil), y quien cocía mondongo ‘gringo’ hasta el pasado agosto, no existe una diferencia notoria a primer gusto sobre si la guatita que está saboreando el cliente fue elaborada con vísceras de res ecuatoriana, brasileña, o chilena.
Desde aquel país del Cono Sur provino el 23% del mondongo importado hacia el Ecuador en el 2011, según el sitio trademap.org (Ver la infografía).
Jeanneth Lema, gerente administrativa de Comisariatos de Carnes El Rancho, considera que la demanda de mondongo importado (en su tienda ubicada en el centro de Guayaquil se comercializan unos 1 000 kg mensuales) responde a temas de eficiencia en los procesos culinarios.
Hasta hace algunos años, la preparación de la guatita iniciaba con la limpieza capa a capa (o también hoja a hoja, pues también se lo conoce como librillo) del pedazo de mondongo adquirido para liberarlo de impurezas.
Al adquirir un paquete de mondongo American Foods -una de las principales marcas de EE.UU. traídas al Ecuador-, los chefs y las amas de casa ahorran tiempo en aquel tedioso proceso, pues se garantiza su asepsia, según indica Lema. Añade que entre sus clientes está una cadena de supermercados e instituciones públicas.
Con ella coincide Julio Paredes, principal de la firma Producarnes, quien ha importado unas 70 toneladas de mondongo en lo que va del año. Paredes indica que este ítem complementa el abastecimiento que requieren los camales locales y las tiendas al por mayor de cárnicos. De allí también que la importación de este producto dependa de los permisos gubernamentales para no afectar a los productores locales.
Para citar un dato, según cifras recogidas en el Camal Municipal de Guayaquil y en la Empresa Metropolitana de Rastro de Quito, son más de 13 500 reses al mes las que se faenan en sus recintos aproximadamente.
Si el peso de un estómago bovino se estima en los nueve kilos, son más de 122 toneladas de mondongo mensuales las que se distribuyen desde aquellos recintos en las dos ciudades. Asimismo, fueron 81,5 toneladas mensuales de librillo importado que se consumieron en el 2011, según datos del BCE.
En los tres locales del restaurante Cocolón en Guayaquil se preparan unas 500 libras de mondongo proveniente de EE.UU., Canadá y Brasil para sus platos. “Teníamos problemas con el producto local por su propensión a deteriorarse en el momento de refrigerarse para reservarlo”.
Para Rolando Burbano, directivo de la firma Marcos Cruz, la importación del mondongo que realiza desde hace cuatro años abastece tanto a restaurantes formales, informales y servicios de catering. Esta empresa tarda unos 45 días en importar un contenedor (24 toneladas) cada mes.
¿Usted prefiere el mondongo importado o el nacional?
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