Gustavo Baroja, presidente del Congope; Patricio Rivera, ministro de Finanzas; y Gonzalo Núñez, gerente del BDE. Foto: Diego Pallero / EL COMERCIO
El Gobierno cancelará a las prefecturas, los municipios y juntas parroquiales las obligaciones pendientes mediante tres mecanismo: efectivo, Títulos del Banco Central (TBC) y desembolsos a través del Banco de Desarrollo del Ecuador (BDE), para ejecución de proyectos de inversión.
La mañana de del lunes 16 de enero del 2017, el ministro de Finanzas, Patricio Rivera, y representantes de los Gobiernos Autónomos Descentralizados (GAD) suscribieron el acuerdo para llegar a esta forma de pago.
En los convenios suscritos se estableció el esquema de pago que se realizará por varios conceptos: Modelo de Equidad Territorial (MET), devolución del Impuesto al Valor Agregado (IVA), competencias de patrimonio, riego y drenaje, y lo establecido en la Ley 047 (que beneficia a algunos organismos con facturación de hidroeléctricas).
A esto se suman las transferencias de diciembre del 2016 y enero del 2017. En total, los pagos a los GAD ascienden a USD 786 millones. De esa cantidad 495,2 corresponden a los municipios, 255,8 a prefecturas y 34,9 a gobiernos parroquiales.
Rivera argumentó que una parte se pagará a través del BDE porque el Gobierno Nacional y los GAD son accionistas. Además, justificó que en este año “se necesita ejecutar proyectos importantes -como de riego y drenaje-” y por esta razón los gobiernos seccionales requieren recursos para proyectos.
Sobre este tema, Gustavo Baroja, presidente del Consorcio de Gobiernos Autónomos Provinciales del Ecuador (Congope) aclaró que no son créditos, sino transferencias por proyectos que deben ser “viables financieramente”.
En el caso de los TBC, Baroja señaló que ya tienen experiencia con estos papeles y “son absolutamente negociables (…) serán recibidos por los proveedores y constructores para el pago de los impuestos”.
El titular del Congope añadió que este acuerdo se llegó gracias a un proceso de diálogo que se desarrolló desde hace algún tiempo con el presidente de la República, Rafael Correa, y los ministros del frente económico.
Para Rivera, los pagos son producto de las señales de recuperación económica que vive el país, lo que se puede ver en el incremento de depósitos bancarios a más de USD 26 000 millones, “la cifra más alta de la historia” y también el incremento de la recaudación tributaria en diciembre: 12% más comparado con diciembre del 2015, sin tomar en cuenta los 2 puntos adicionales del impuesto al valor agregado (IVA), que se recaudó para los afectados del terremoto del 16 de abril del año pasado.
Gracias a una mayor recaudación de impuestos, dijo Rivera, se ha pagado parte de las deudas a los GAD.
Otro indicador de recuperación que presentó Rivera fue el número de cuentas pendientes de pago. Al cierre del 2015 quedaron pendientes 175 000 pagos que ascendían a USD 1 500 millones, mientras que al cierre del año pasado solo quedaron por cancelar 18, que representaban unos 100 millones. Además, señaló que la caja fiscal en el 2015 tenía USD 75 millones y al cierre del año pasado contaba con 570 millones.
Debido a este escenario favorable, según el titular de la Cartera de Finanzas, a partir de febrero se normalizarán los pagos a los GAD.
Fausto Ortiz, exministro de Finanzas, señaló que el Gobierno se pone al día con los GAD a por medio de tres pagos -que incluyen TBC y transferencias del BDE- y eso indica que hay un momento de iliquidez, pese a que las cuentas luzcan sin atrasos. “La caja no cuenta con muchos recursos”.
“Puede ser que la caja luzca más alta porque hubo la colocación de los últimos bonos de USD 1 000 millones (…), pero eso no quiere decir que el Gobierno cuente con suficiente liquidez porque para este año están presupuestando un déficit fiscal del mismo orden de los USD 6 000 millones” .
Sobre este tema, Rivera defendió la mañana del lunes la emisión de bonos, aunque anticipó que hasta que el Gobierno termine su mandato no están consideradas nuevas emisiones de bonos.
Alberto Acosta Burneo, director de Análisis Semanal, coincide con Ortiz y cree que el método de pago que usa el Gobierno pone en evidencia la falta de liquidez en el Fisco.
Para el analista, menos de la mitad de los pagos será en efectivo. “Si tuviera los recursos no se hubiera atrasado y además pagaría en efectivo”, señaló Acosta Burneo.
Ortiz añadió que otra muestra de la falta de liquidez es el crédito de liquidez por USD 550 millones que el Banco Central realizó a Finanzas la semana pasada.