Al menos un mes tardará la creación y puesta en marcha de las dos entidades que administrarán y controlarán la actividad petrolera pública y privada en el país.
Estas son la Secretaría de Hidrocarburos y la Agencia de Regulación y Control Hidrocarburífero (ARCH) que fueron creadas dentro de las reformas a la Ley de Hidrocarburos, que está previsto se publique hoy en el Registro Oficial y entre en vigencia.La ARCH pasará a reemplazar las funciones de la actual Dirección Nacional de Hidrocarburos (DNH) y contará con el mismo personal, según el ministro de Recursos No Renovables, Wilson Pástor. A cargo de esta agencia estará Carlos Loor, quien en tres ocasiones ya se desempeñó, como titular de la DNH, entre los años 1990 y 1993.
Loor además ocupó el cargo de director de la Asociación Nacional de Comercializadoras de Combustibles, que actualmente agrupan a medianas y pequeñas gasolineras nacionales.
Precisamente a estas empresas que representaba, ahora deberá fiscalizar, ya que dentro de las competencias de la ARCH estará fijar sanciones a las gasolineras que incumplan con los niveles de cantidad y calidad.
El representante de los trabajadores petroleros, Diego Cano, indicó que podría haber un posible conflicto de intereses. Y añadió que más allá de quién sea el titular, la ARCH actuará bajo el Ministerio de Recursos No Renovables, lo cual no le dará la suficiente independencia para controlar.
Por otra parte, la Secretaría de Hidrocarburos también actuará bajo esta Cartera de Estado y estará conformada por los funcionarios de la Unidad de Contratación Petrolera de Petroecuador. El actual director de la DNH, Ramiro Cazar, será su titular.
Esta secretaría reemplazará a Petroecuador en la suscripción y administración de contratos petroleros con las compañías privadas. En total asumirá 15 competencias, entre las que destacan la aprobación de planes de inversión de las privadas y estatales y el manejo de información de las áreas de exploración y explotación.
También administrará los campos que se reviertan al Estado, en caso de que fracase la renegociación de contratos con las compañías petroleras privadas.
fakeFCKRemoveTambién fijará las tasas de producción de petróleo de las empresas y podrá solicitar al Ministerio de Recursos No Renovables la caducidad de los contratos petroleros mediante un informe previo. Esta atribución pertenecía antes a Petroecuador. Podrá pedir la revocatoria de autorizaciones o licencias emitidas para actividades hidrocarburíferas. A más de estas competencias definirá las áreas de operación directa, es decir sin licitación, de las empresas públicas y los campos que manejen las privadas. Para Henry Llanes, sindicalista petrolero, con estas reformas prácticamente Petroecuador desaparecerá.
De hecho, esta entidad reorganizará los bloques petroleros y revertirá para el Estado las áreas adjudicadas a las compañías privadas que no registren operaciones de exploración o explotación
Pástor, manifestó que las compañías solo realizan actividad en el 20% de las áreas que tienen asignadas. El funcionario aseguró que el restante 80% de estos bloques regresará al Estado a menos que las compañías reactiven la exploración en esos sectores. Las áreas que sean revertidas para el Estado volverán a licitarse en abril del 2011. En la reformas se contempla, además, que estarán excentas del proceso de licitación las empresas estatales extranjeras o mixtas donde el Estado tenga la mayoría de participación accionaria. Este punto es cuestionado por el ex ministro de Energía, René Ortiz, quien manifiestó que viola el principio constitucional de igualdad ante la ley. Cuestionó además que el proyecto no haya sido debatido en la Asamblea.
Advierte que las reformas difícilmente atraerán la inversión extranjera ya que el Estado se asegura el 25% del ingreso bruto de los campos pese a que por los precios puedan generar pérdidas.