La Estación Las Esclusas, en Guayas, recibe la energía de la central hidroeléctrica Coca Codo Sinclair. Foto: Mario Faustos / EL COMERCIO
El Sistema de Transmisión de 500 kilovoltios (kV), un cableado de gran potencia, se inauguró el pasado jueves 13 de junio de 2019 oficialmente. De esta manera, luego de casi tres años de inaugurada la hidroeléctrica Coca Codo Sinclair, la energía de esta central llegó a las provincias de Guayas y Santa Elena.
La central, ubicada en Napo, tiene una capacidad de 1 500 megavatios (MW). Pero en el primer trimestre de este año, Coca Codo produjo, en promedio, 534,9 MW, de acuerdo con datos de la Corporación Eléctrica del Ecuador (Celec).
Gracias a la conexión con Guayaquil, esa oferta subió en 200 MW en el primer ensayo que se hizo el miércoles pasado. El costo total de la obra fue de USD 677 millones.
La energía del Coca Codo es conducida hasta El Inga, para abastecer a Quito. Luego va a Tisaleo, donde se realiza un control del voltaje y, luego, llega a Chorrillos. Desde esta última, la electricidad se reparte a otras subestaciones como Las Esclusas, Pascuales, Trinitaria y Caraguay, para abastecer a Guayas y a Santa Elena.
En Las Esclusas, en el sur de Guayaquil, el presidente Lenín Moreno realizó ayer el acto simbólico de entrega de la obra. La inauguración se hizo una vez que se concluyera el tramo de la línea El Inga – Tisaleo y luego de lograr un acuerdo con comunidades de la zona que se oponían a la obra.
Roberto Simpson, gerente de Celec, y Carlos Pérez, el ministro de Energía, participaron en el acto. El Ministro explicó que la energía generada por Coca Codo atraviesa 900 kilómetros, de Napo a Guayas.
El titular de la Cartera aseguró que para destrabar la obra, que tenía oposición en Tungurahua, se formó una mesa de diálogo con todos los actores y se lograron acuerdos.
Gracias a ello, los trabajos se retomaron en febrero pasado, luego de que estuvieran paralizados desde mayo del 2016.
El Primer Mandatario dijo que con este sistema se espera alcanzar el 92% de generación eléctrica en el país a través de recursos hídricos.
Para Raúl Canelo, gerente de Celec Transelectric, con este sistema se duplicará el voltaje y se cuadruplicará la capacidad para transportar la energía en el país. Todo ello, dijo, permitirá reducir las pérdidas y contar con un sistema eléctrico más estable.
La Línea de 500 kV se suma al cableado de menor potencia que existe hoy y que es de 230 kV. Si se compara con una vía, la línea de 500 kV es similar a una autopista de ocho carriles y la de 230 kV, a una de cuatro.
Guayaquil es uno de los principales centros de consumo de energía del país, con el 30 % de la demanda nacional.
La principal fuente de energía del Puerto era la térmica, que usa diésel; es decir, costosa y contaminante. Al dejar de utilizar ese recurso, el beneficio ambiental para Guayaquil será la reducción de 124 000 kilotoneladas de CO2 por cada 100 megavatios entregados.
Canelo indicó que el cableado de 230 kV se seguirá usando. Además, precisó que las plantas térmicas se mantendrán en Guayas para utilizarlas en períodos de sequía.
Celec Transelectric aún deberá invertir en ampliar el nivel de distribución eléctrica, ya que faltan alimentadores en diferentes puntos del país. Estos tendidos eléctricos servirán para entregar una carga de 69 kV a las zonas residenciales e industriales, dijo Canelo.
En San Gregorio (Manabí) y en Esmeraldas se necesita uno. En Durán (Guayas), en cambio, se necesitan dos alimentadores, aunque no se detalló el monto de recursos que se requerirá. La segunda fase en esta obra implica la instalación de redes de interconexión entre Perú – Ecuador – Colombia.
El Jefe de Estado anunció que se trabaja en lograr un acuerdo con la Comunidad Andina para exportar energía a esos países y en la conexión con naciones del sur del continente, en especial con Chile.
El nuevo sistema también permitirá el uso de energía limpia para el sector petrolero, a través de las subestaciones Jivino y Shushufindi. Así, se desplazará el uso de combustibles fósiles para las operaciones petroleras. Además, se tomará electricidad para el programa de electrificación de la industria camaronera. Estos proyectos se impulsarán en alianza con el sector privado.
Caterina Costa, presidenta de la Cámara de Industrias de Guayaquil, dijo que la obra fortalece el sistema de transmisión y evitará cortes de energía que en el pasado generaron cuantiosas pérdidas al sector productivo.