Los datos de prueba, protección a las indicaciones geográficas (origen de los productos) y la biodiversidad se convirtieron en los temas más sensibles de las negociaciones comerciales entre Ecuador y la Unión Europea (UE). La Constitución del 2008 obliga a los negociadores locales a no salirse de la línea de juego en esos temas, mientras que los europeos buscan consensos para que no afecte los intereses de ambos.La UE tenía como objetivo lograr acuerdos similares a Perú y Colombia. Renato Carló, gerente de Laboratorios Kronos, dijo que la industria farmacéutica local no está preparada como la de Colombia y Perú para negociar en iguales condiciones. “No hay instituciones fuertes para competir con las industrias europeas que son las pioneras en el negocio”.De ahí que los negociadores ecuatorianos liderados por Méntor Villagómez analizan los acuerdos con la Constitución en mano. Según Carló, los resultados de las negociaciones no serán iguales a Colombia. Los europeos acordaron con Colombia que se proteja las indicaciones geográficas de productos agrícolas y alimenticios, vinos y bebidas espirituosas. En cambio, con Ecuador se acordó preliminarmente proteger el origen en productos como sombreros de paja toquilla de Montecristi y el cacao fino de aroma.Asimismo, la UE reconoció a Colombia la importancia de la biodiversidad, como también los derechos soberanos del país sobre recursos naturales. Un informe del Ministerio de Comercio, Industria y Turismo de Colombia señaló que se acordó un texto que reflejara la relación entre biodiversidad y propiedad intelectual en las patentes. “Se reconoció sujetar la utilización del conocimiento tradicional al consentimiento previo de las comunidades y a una distribución justa y equitativa de beneficios”. En Ecuador, la estrategia es que se proteja los conocimientos tradicionales asociados a la biodiversidad para que no exista biopiratería. Y en la protección de datos, en Colombia se estableció una exclusividad de 5 años y se permitió a las partes reglamentar excepciones por razones de interés público. La Constitución del Ecuador dice que habrá un libre acceso a medicamentos.