El campo de gas natural Amistad se encuentra en el golfo de Guayaquil. Está a 70 kilómetros de distancia de la costa. La operación del campo está a cargo de Petroamazonas desde el 2013. Antes, en 2011 y 2012, estuvo Petroecuador. Foto: Cortesía PETROAMAZONAS
La producción de gas natural del campo Amistad resultará insuficiente en octubre del 2018. Para entonces, la demanda de este derivado será de 89 millones de pies cúbicos diarios para generar energía y para el sector industrial. Pero el país estará en condiciones de entregar solo 38 millones.
A pesar de la inversión de USD 545,9 millones que hizo el Estado, entre el 2011 y 2017, para subir la producción hasta los 100 millones de pies cúbicos, este campo se encuentra en declinación.
Esta área, actualmente produce 36,9 millones de pies cúbicos de gas, según el reporte de producción de Petroamazonas del 25 de marzo del 2018.
Según la Secretaría de Hidrocarburos, esta área tiene reservas probadas y probables (2P) de 0,339 trillones de pies cúbicos. Estas se encuentran por debajo de las cifras que anunció el Gobierno anterior (1,7 trillones de pies cúbicos), que fueron sobreestimadas. “Con el volumen actual estamos bastante limitados en la producción de gas”, reconoció Álex Galárraga, gerente de Petroamazonas.
Pese a estas condiciones, a partir de octubre, Petroamazonas -que está a cargo de la operación de Amistad- deberá entregar diariamente 63 millones de pies cúbicos a la Corporación Eléctrica del Ecuador (Celec): 12 millones para la planta de licuefacción de Bajo Alto y 14 millones para el proyecto privado Vesubio. En promedio serán 51 millones de pies cúbicos adicionales.
Para satisfacer en parte esta necesidad, en agosto próximo se conectará una tubería submarina desde un nuevo pozo hasta la plataforma principal de Amistad. Esto permitirá aumentar la producción en alrededor de 10 millones por día, informó Petroamazonas.
En el segundo semestre de este año, el Gobierno espera también concluir con la búsqueda de inversión privada para esta área. El propósito es conseguir financiamiento hasta cinco años plazo, para perforar entre cuatro y seis pozos en el golfo de Guayaquil.
Para este proceso, la estatal petrolera prevé que las firmas interesadas planteen costos entre USD 12 millones y 15 millones para cada uno de los pozos perforados. Durante el Gobierno anterior, para cada una de estas infraestructuras se destinaron USD 90,9 millones.
Además, para la nueva licitación se aspira a obtener facilidades: pagar luego de la presentación de facturas y un período de gracia de 12 meses.
Para incrementar la producción de gas natural se requerirán alrededor de USD 120 millones. Pero antes de asignar estos recursos se evaluarán las condiciones de las ofertas.
“Si obtenemos valores económicos (hasta 15 millones por pozo) seguirá adelante este proyecto, pero si lo superamos Amistad prácticamente se muere y traeremos gas desde Perú”, enfatizó Galárraga.
Según proyecciones de Petroamazonas, en un escenario positivo con cuatro pozos adicionales el campo Amistad subirá su producción a 67,7 millones de pies cúbicos en el 2020. La diferencia para satisfacer la demanda se cubrirá con importaciones de este derivado.
Desde el 2021, en cambio, se estima que la producción descienda a 8,3 millones. Ecuador dispondrá de gas natural solo hasta el 2027.
Petroamazonas mantiene conversaciones con la firma canadiense Frontera Energy, para abastecerse de este producto desde Perú. Este tiene un costo estimado de USD 3,75 el millón BTU. El gas natural de Amistad se entrega a Petroecuador a USD 2,75 el millón BTU, pero al ser transformado a gas licuado, los industriales pagan USD 5,31, aunque este costo podría variar si se importa. Las inversiones realizadas y la infraestructura existente obligan a buscar medidas para cubrir la demanda.
Wilson Pástor, exministro de Recursos No Renovables, mencionó que el Estado debe importar -si es comercial- o seguir explorando. “Siempre hay proyectos con mayor riesgo. Pero no se debe descargar responsabilidades contra las administraciones pasadas, como es la constante hoy día”.
Solo en el sector industrial, 15 empresas de Guayas, Pichincha, Azuay y Chimborazo que fabrican cerámicas invirtieron alrededor de USD 30 millones para emplear gas en sus procesos en lugar de diésel. Andrés Robalino, director de la Cámara de Industrias de Cuenca, expresó que desconocían la realidad del campo Amistad. “Las altas expectativas se han transformado en malas noticias”.
Celec está instalando turbinas de ciclo combinado para generar energía en Termo Gas Machala. Y la planta estatal de Bajo Alto no está operando a su máxima capacidad, pero cuando esté funcionado de manera óptima podría demandar más de este derivado.