La firma contable Serpofempsa, de Guayaquil, asesora en trámites tributarios. Foto: Cortesía Serprofempsa
La pandemia incidió en la retención del impuesto a la renta y la deducción de gastos de aquellas personas naturales que trabajaron en relación de dependencia el año pasado.
Uno de los cambios se produjo por efecto de la aplicación de la reducción de la jornada, una medida que aplicaron las firmas desde marzo de 2020 y que incidió en los salarios de los trabajadores.
El impuesto a la renta debe ser pagado por las personas naturales que tuvieron salarios mayores a USD 943 al mes (11 315 al año) en el 2020, de acuerdo con una tabla. Pero si el salario bajó, la retención del tributo debió reducirse.
Un ajuste a la remuneración también incide tributariamente en las personas que no podían deducir gastos porque tenían ingresos superiores a USD 8 333 al mes o 100 000 al año. Una proporción de estas personas ahora podrá hacerlo en la medida que su salario se redujo por debajo de ese límite (las más cercanas a la base).
“Los empleadores debieron hacer un ajuste en las proyecciones de los salarios que se pagaron durante el resto del año a sus empleados para ajustar la retención”, dijo el abogado tributario Carlos Licto.
Pero Napoleón Santamaría, asesor tributario, comenta que tiene clientes corporativos que no hicieron este cambio porque pensaron que la pandemia sería de corta duración.
Los expertos contables y tributarios recomiendan revisar el salario real percibido en el 2020, el valor del impuesto a la renta retenido por el empleador mes a mes y los gastos personales incurridos.
Todos estos factores afectaron a varios trabajadores, que ahora deberán presentar un reclamo de pago indebido para que el SRI les devuelva el valor del tributo pagado en exceso.
Otro problema fue que, sea por descuido de los trabajadores o de los empleadores, no se actualizaron las proyecciones de gastos personales el 2020.
Con ello, todos los que proyectaron gastos mayores a USD 5 675 (que es el 50% de la base imponible, que para 2020 fue de USD 11 315) tienen que presentar obligatoriamente el anexo de gastos personales en febrero de este año, independientemente del monto de su salario anual, aclaró el SRI.
Es importante tener clara esta situación, pues si una persona no hace el trámite porque equivocadamente piensa que al recibir un menor sueldo no lo necesita, recibiría multas o sanciones, dijo Santamaría.
El anexo de gastos personales, además, sirve de base para presentar un reclamo de pago indebido, sobre todo considerando que los gastos de salud subieron en la pandemia.
Laura Chica lleva bien sus cuentas. La empleada ajustó en julio su proyección de gastos porque su salario se redujo y los gastos cambiaron. La empresa donde labora redujo su jornada desde mayo y su sueldo pasó de USD 1 500 a 1 200.
En julio realizó la actualización de su proyección de gastos personales porque lo que planificó para inicios del año cambió, especialmente en salud. Esta ingeniera comercial incrementó su proyección de gastos en salud porque a su esposo lo operaron de emergencia por un tumor en la próstata. Y bajó el monto en vestimenta y vivienda. “Inicialmente había colocado que en salud gastaría USD 1 000 en el año, pero esa cuenta se triplicó”, dijo.
La empleada Andrea Ramón, en cambio, no tuvo reducción salarial, pero sí superó el monto de gastos que había puesto en salud, ya que toda su familia se infectó de covid-19.
“Mi proyección era de USD 2 500, pero los superé. El mayor gasto fue por la atención médica debido a las secuelas de la enfermedad”, relató.
El Servicio de Rentas informó que cuando existe una reducción inesperada del salario, la proyección de gastos personales se puede actualizar en cualquier momento.
Valentina García, de 25 años, bajó casi en un 80% su gasto en educación en el 2020 porque decidió cambiar de escuela particular a su hijo, de 5 años.
Carlos Falconí, gerente de la firma contable Servicios Profesionales Empreariales (Serprofempsa), señala que sus clientes han subido en un 30% los gastos personales en salud en el 2020; en cambio, bajaron las compras de ropa y salidas a comer. Aunque también se podía deducir los gastos de turismo, los contribuyentes limitaron esta actividad debido a las restricciones.
Falconí recomienda a los empleados que traten de ser lo más realistas posibles en la proyección de gastos personales que se presenta este mes. Es importante llevar un control mes a mes para ver si cumplen con el cálculo, en especial si se usa todo el cupo disponible, a fin de evitar trámites tributarios innecesarios a futuro.
Proyección 2021
Ingreso. El empleado deberá sumar todas las remuneraciones, excepto décimos, proyectadas para todo el ejercicio económico.
Actualización. La proyección de gastos de enero se puede actualizar en julio y agosto. Si baja el sueldo se puede ajustar de inmediato.
Proyección de gastos. Se deberá realizar según lo que se estime gastar en el 2021, independientemente de los gastos efectuados en el 2020.
Insumos de bioseguridad. En salud se podrán considerar como gastos deducibles: mascarillas, protectores faciales, alcohol e insumos médicos.
Educación. En la deducción se puede incluir equipos de computación y material educativo, incluso Internet, sustentados en comprobantes.
Libros virtuales.
Se puede deducir la compra de libros virtuales, siempre y cuando se sustente el gasto en comprobantes de venta válidos.
Computador para teletrabajo. La compra de la computadora por el teletrabajo no es deducible como gasto personal.