Entre el 2014 y el 2017 se perdieron 128 319 empleos adecuados, según datos del Instituto Nacional de Estadística y Censos (INEC).
Sin embargo, en los dos primeros meses de este año, según el titular de Trabajo, Raúl Ledesma, se registraron 100 000 nuevos contratos laborales, especialmente en los sectores de la pesca, el camarón y la construcción.
El número contrasta con la opinión de los empresarios. En enero y febrero la demanda de trabajadores en los sectores de servicios, industrias, construcción y comercio cayó entre el 0,3 y el 1,9%, según el Estudio Mensual de Opinión Empresarial elaborado por el Banco Central.
La demanda se contrajo más en febrero en el sector de la construcción, según esa encuesta, que consulta a 1 000 empresas grandes.
Para marzo de este año, los empresarios también proyectan cifras negativas o en el mejor de los casos un estancamiento (ver gráfico).
Ledesma justificó el incremento del empleo en la reactivación de la construcción, gracias al anuncio y posterior derogatoria de la denominada Ley de plusvalía, lo cual -según dijo- comenzó a generar confianza en el sector.
Según el colectivo Constructores Positivos, la norma ocasionó una reducción de 77 742 empleos adecuados entre 2015 y 2017.
Las empresas que están en esta actividad aún no han percibido un incremento en el número de empleos por el cambio del marco jurídico.
La recuperación de la actividad, en materia de contratación laboral, se espera para el segundo semestre.
Joan Proaño, gerente de la Constructora Proaño, señala que tras la consulta de febrero las ventas y afluencia de público a los proyectos mejoró en un 50%.
Esto les da un aliciente para comenzar proyectos inmobiliarios que tenían represados, pues asegura que todo estaba paralizado.
La construcción se divide en tres etapas: cimentación y estructura, albañilería y acabados. La segunda fase es la que más trabajadores requiere.
En ello coincide Gonzalo León, gerente de GLS Constructores SA. Esta empresa no evidencia una recuperación en términos de empleo. León asegura que la Ley de plusvalía impactó negativamente en los precios de las viviendas, pese a ello la demanda no aumentó.
En esta constructora la contratación de personal cayó hasta 40% desde el 2015.
David López, director económico de la Cámara de Comercio de Quito, explicó que este sector venía recuperándose, luego de dos años de salvaguardias. En ese tiempo se perdieron 80 000 puestos. El anuncio de alza de aranceles amenaza con impactar nuevamente el empleo, consideró.
En cambio, el sector camaronero registró mejores indicadores laborales. La producción del crustáceo repuntó el 2017 y se convirtió en el principal producto de exportación no petrolero, desplazando al banano al segundo puesto.
Según el presidente de la Cámara Nacional de Acuacultura, José Antonio Camposano, la contratación de personal creció 14% en promedio anual desde el 2010, principalmente en las áreas de proceso.
Pero, para Camposano, no habrá un incremento sostenible si no se trabaja de forma coordinada con el Gobierno, en especial con el Ministerio de Finanzas para bajar aranceles a insumos, que atentan contra la competitividad. La actividad emplea a 210 000 personas.
Ledesma emitió tres acuerdos para flexibilizar la jornada laboral y aumentar el empleo en tres sectores: flores, banano y turismo. El INEC prevé presentar hoy las cifras de empleo a marzo del 2018.