El crecimiento económico del país se aceleró al 8,62% en el primer trimestre de este año, impulsado por el desempeño de varios sectores, entre ellos el de la construcción, que creció 17,5% respecto a igual período del 2010.
El dinamismo en este sector se explica por la fuerte inyección de recursos, básicamente del sector público, pero también por el crédito de instituciones privadas.
Los créditos otorgados, tanto a compradores como a vendedores, ha permitido que la venta de casas, departamentos y oficinas crezca a un ritmo sostenido.
Así lo explica Verónica Viteri, gerenta de Crédito de la constructora Uribe & Schwarzkopf. “El crédito impulsa al sector de la construcción. Los bancos ofrecen créditos a las empresas reconocidas en el mercado y otorgan financiamiento sin inconveniente”.
Esta constructora, que está en el mercado ecuatoriano desde 1973, cuenta que las ventas de inmuebles creció un 32% en el primer trimestre de este año, comparado con igual período del 2010. El año pasado se comercializaron 150 viviendas, cada una con un parqueadero y una bodega, lo cual representó ventas por USD 15,2 millones.
En el primer trimestre del presente año se comercializaron 208 viviendas, que significó ventas por unos USD 20 millones.
La mayor demanda de inmuebles fue impulsada por los créditos hipotecarios del Banco del IESS (Biess). Esta entidad, que comenzó a operar desde el 18 de octubre del año pasado, entregó a los afiliados USD 425 millones en créditos hipotecarios hasta el 1 de junio pasado. Esos recursos se destinaron a 40 000 familias.
Además, la entidad otorgó créditos a las empresas constructoras por unos USD 35 millones, recursos que se destinaron a siete proyectos inmobiliarios en Quito Cuenca y Esmeraldas. “El Biess representa más del 50% del mercado de los créditos hipotecarios”, señaló Omar Serrano, representante de los afiliados al Directorio del Biess. El objetivo de la entidad, dice, es desarrollar proyectos de vivienda para cubrir la demanda. “En el país hay un déficit de 1,2 millones de viviendas”.
Maurizio Cattani, de la constructura que lleva su nombre en Quito, concuerda con esta cifra y advierte que este déficit crece 1% cada año. Esto significa que hay una oportunidad para que los constructores ingresen al mercado con proyectos para personas de clase media y baja.
Otro financista importante del sector de la construcción ha sido la banca privada. César Robalino, director ejecutivo de la Asociación de Bancos Privados del Ecuador (ABPE), señaló que entre enero y mayo del presente año se han entregado 3 987 créditos para el sector de la construcción. Esto representa unos USD 186 millones. Durante el año pasado se entregaron 462 millones en 10 304 operaciones de crédito.
En total, tanto la banca privada como el Biess han destinado USD 611 millones para créditos hipotecarios en lo que va del año.
Por su parte, Jaime Rumbea, vocero de la Asociación de Promotores Inmobiliarios de Vivienda del Ecuador (Apive), explicó que el mercado inmobiliario del país generó cerca de USD 1 700 millones en ventas durante el año pasado. “Este año el crecimiento debería estar entre el 10 y 15%”.
La Apive está conformada por 20 empresa constructoras e inmobiliarias a escala nacional. Este grupo de compañías comercializa en el mercado unas 10 000 viviendas cada año.
Hermes Flores, presidente de la Cámara de Construcción de Quito, señala que este sector emplea entre un 7 y 10% de la población económicamente activa (PEA). Esto significa que alrededor de 400 000 personas trabajan en la construcción.
Para el Banco Central del Ecuador, el crecimiento registrado en el sector de la construcción se originó, entre otras causas, por la continuación de los proyectos de infraestructura civil ejecutados por el Estado, así como por los programas inmobiliarios privados y públicos.