El Servicio de Rentas Internas (SRI) definió que los establecimientos que se dedican a la comercialización de bienes usados deberán detallar en una factura la compra y venta de dichos artículos. Esto aplicará también para las transacciones que invoucran bienes usados como parte del pago para la adquisición de bienes nuevos.
Los establecimientos deberán regular estas actividades hasta diciembre de este año, ya que desde enero del 2013 se procederá a las respectivas sanciones, que pasarán ya no solo por la incautación sino también con procesos penales.
Con estas medidas, según las autoridades del SRI, se eliminarán en gran medida zonas como las de la Plaza Panzaleo, en Machachi, donde es conocida la comercialización de bienes de dudosa procedencia.
Esta regulación también será obligatoria para los talleres de reparación de bienes, los cuales deberán emitir órdenes de trabajo, a fin de justificar el origen lícito.