La segunda tuneladora, que perforó 13,8 kilómetros desde el embalse compensador hacia el frente Ventana 2 concluyó su trabajo ayer. Foto: Diego Pallero / EL COMERCIO.
La central hidroeléctrica Coca-Codo Sinclair comenzará a entregar energía al país de manera progresiva desde febrero del 2016. De acuerdo con el ministro de Electricidad, Esteban Albornoz, en un inicio ingresarán cuatro de las ocho turbinas o unidades que lo componen para luego generar su máxima capacidad.
El funcionario aclaró que dependiendo del avance de la obra podrían ingresar más turbinas de las previstas. Estos anuncios los hizo ayer Albornoz en el marco de la conclusión del primer tramo del túnel de conducción de aguas de la central hidroeléctrica.
El proyecto se extiende a lo largo de 22 hectáreas en las provincias de Napo y Sucumbíos y tendrá una potencia de 1 500 megavatios (MW). Es decir, un 50% más de potencia que la central Paute, que hoy es la mayor generadora del país.
Los frentes del proyecto son las Obras de Captación; el Túnel de Conducción de Agua (Ventana 2); el Embalse Compensador y la Casa de Máquinas.Por las dimensiones, el desplazamiento a cada frente tarda de una a tres horas.
La central funcionará así: al inicio del río Coca (unión del Salado y Quijos) se construirá una estructura para captar el 76% del caudal medio anual.
Este volumen fluirá por un túnel horizontal subterráneo de 24,8 kilómetros, para luego precipitarse 620 metros, en caída vertical, hacia ocho turbinas que generarán energía con el caudal y la fuerza con que cae el agua.
La construcción de la central arrancó en julio del 2010 con un costo de USD 2 200 millones incluida su fiscalización que en su mayoría es financiada por un préstamo de China. La empresa constructora es Sinohydro, también de ese país.
Ayer finalizó el primer tramo del túnel de conducción de agua. Este túnel lo perforaban dos tuneladoras (también conocidas como TBM, topos o taladros) cada una con una cabeza de nueve metros de diámetro y 150 metros de longitud.
La primera tuneladora o TBM 1 realiza una perforación de 10 kilómetros desde el frente Ventana 2 hacia las obras de captación. A esta máquina le faltan apenas 600 metros para concluir.La segunda tuneladora o TBM 2 -que realizaba la perforación de 13,8 kilómetros desde el embalse compensador hacia el frente Ventana 2- concluyó su trabajo ayer.
En medio de aplausos y vítores de funcionarios, trabajadores, estudiantes invitados y autoridades del sector eléctrico, la cabeza del TBM 2 rompió ayer la última pared de roca que previamente había sido humedecida por una máquina lanzadora de hormigón.
Esta última perforación que provocaba en el lugar una fuerte vibración tardó cerca de 15 minutos hasta que finalmente rompió la pared levantando una nube de polvo.En pocos segundos se disipó y de la esquina derecha inferior de la cara frontal del TMB 2 se abrió una pequeña compuerta de la que salieron dos trabajadores: un chino y un ecuatoriano que en sus manos sostenían las banderas de ambos países.
El gerente de Coca-Sinclair, Luis Ruales, destacó que de la obra participan cerca de 7 000 trabajadores chinos y ecuatorianos y que tiene un avance del 81%.
El otro tramo de la perforación del túnel que al momento se encuentra en 9,5 kilómetros concluirá la primera semana de marzo. Luego vendrá un proceso de empate de ambos tramos a través de la colocación de 100 metros de dovelas de hormigón.
Posteriormente vendrá un proceso de limpieza y retiro de luminarias, indicó Ruales. El llenado de la central se prevé para finales de año. Albornoz indicó que el proyecto hidroeléctrico operará en febrero del 2016.