Technovasol ha instalado 700 calentadores solares (foto) desde el 2014. Foto: Vicente Costales / EL COMERCIO
Las familias o empresas interesadas en reducir los costos de la planilla de energía eléctrica mensual tienen una opción. El Directorio de la Agencia de Regulación y Control de Electricidad (Arconel) aprobó a fines de octubre una normativa para viabilizar la microgeneración con radiación solar en el país.
Mediante esta iniciativa, los usuarios cuyo consumo de energía sea alto, podrán instalar paneles solares para cubrir su demanda. Estos aparatos deben tener una capacidad de hasta 500 kilovatios (kW).
Esto permitirá que los clientes tengan estabilidad en el suministro de energía y que los costos del servicio sean competitivos. Además se promoverá el uso de energías renovables, refirió Gabriel Salazar, director ejecutivo de Arconel.
Los interesados en colocar este tipo de paneles deben realizar un estudio para determinar la demanda del servicio y en función de eso construir una microcentral de generación fotovoltaica (solar).
También se requiere un estudio eléctrico que establezca que estas instalaciones no producirán afectaciones al servicio. Estos informes se deben presentar ante la empresa eléctrica de cada localidad. La regulación establece un plazo de 10 días para analizar la información y emitir un pronunciamiento u observaciones.
Una vez aprobado este procedimiento, Arconel autorizará al cliente la producción de energía fotovoltaica.
Para colocar los paneles solares se requiere un espacio abierto, que no reciba sombra. Puede ser el patio o la terraza.
El tamaño de la central estará en función de la demanda requerida. Para una vivienda de unos 300 metros cuadrados, que consuma más de 1 000 kilovatios hora al mes, es decir, que tenga duchas eléctricas, aire acondicionado, iluminación exterior y otros, se requiere una central de 40 kW.
Para una empresas o industria se necesitaría una central de hasta 500 kW de capacidad.
Aparte de los paneles se debe instalar un medidor bidireccional. Este permite medir la energía que el cliente recibirá, en algunas circunstancias, de la red eléctrica y el recurso producido con radiación solar, que entregará a este sistema.
Así, en el caso de que se produzca una diferencia entre la producción de energía fotovoltaica y el consumo mensual, el cliente podrá adquirir el recurso de la empresa distribuidora. Y cancelará solo por la cantidad extra. Actualmente, el programa Redes Inteligentes Ecuador fabrica estos equipos, pero también se puede importar.
Pero, ¿qué sucede si la familia se ausenta y no consume su energía solar? Esta se entregará de manera automática a la red eléctrica. Esto no implicará pérdidas para los abonados, puesto que el recurso producido se puede usar hasta 24 meses después de haberlo generado, sin que esto represente costos adicionales.
En estos casos, los abonados no recibirán dinero a cambio de la entrega del excedente de este recurso, enfatizó Salazar.
Este programa es diferente al que se promovió en el 2011 para la producción de energía fotovoltaica. Entonces el objetivo era generar energía solar a mayor escala y venderla a las empresas distribuidoras; sin embargo esto no prosperó, en algunos casos por diferencias con los inversionistas.
En las microcentrales, que se promueven ahora, la instalación de paneles y del medidor será asumida por cada cliente.
Por ejemplo, para instalar una central de 20 kW se requiere de una inversión de USD 20 000 o 30 000. Este tipo de central está diseñada para una familia de cinco integrantes que consume 1 000 kilovatios-hora/mes, en la Costa.
Carlos Pérez, ministro de Energía y Recursos Naturales, en una entrevista radial informó que las minicentrales solares permitirán diversificar la generación de energía, debido a que Ecuador depende en su mayoría (85%) de las hidroeléctricas. “La disponibilidad de recursos hídricos por las condiciones globales es cada vez más escasa”.
Para Eduardo Rosero, presidente de la Asociación Ecuatoriana de Energías Renovables y Eficiencia Energética, esta regulación permite incentivar la generación no centralizada. Esto ayuda a bajar el nivel de vulnerabilidad del sistema. “Si apostamos solo a hidroeléctricas de gran escala podríamos volver a tener apagones como los de octubre”.
Andrés Segovia, representante de Technovasol, empresa que vende calentadores de agua e iluminación solar, mencionó que aún no ha incluido paneles de generación en su portafolio, porque no existe mayor demanda. Esto ocurre, -según Segovia- porque se requiere una inversión alta y las tarifas de luz son bajas. Pero, dijo que si hay pedidos considerará vender estos equipos.