Redacción Negocios
En los últimos tres años, diferentes organismos y analistas han situado al país en los últimos puestos en sus escalafones de medición en diferentes áreas, transformándola, para la mirada externa, en una nación poco amigable.
El analista Walter Spurrier, en su informe de Análisis Semanal de diciembre del año pasado señala como “calificaciones bochornosas”, las que obtiene el país a nivel mundial. “La amenaza es que uno de estos días Ecuador sea excluido de la lista de países que generan interés y se lo agrupe con los que no merecen interés. No se trata que las calificaciones que recibe Ecuador se deterioren tanto de un año a otro, sino que otros países están progresando más, independientemente de cuál es la materia medida”.
Para Carol Chehab del Observatorio de Comercio Exterior, este tipo de índices sí inciden en la toma de decisión de los inversionistas para colocar sus capitales. “Indudablemente, los índices como el de corrupción o el de transparencia tienen una afectación directa sobre las inversiones productivas. El factor más importante para un inversionista es que tenga seguridad jurídica”.
El catedrático en Economía, Nicolás Espinosa, afirma también que la situación de la imagen del país está en un punto crítico porque no se trata solo de analizar los rankings, sino, sobre todo, qué está ocurriendo al interior del país para que eso se refleje afuera.
“Hay un descuido en el manejo de la imagen a nivel internacional. Si cada vez nos estamos alejando más en la corriente que lleva la mundo, es obvio que los efectos se vean reflejados en los índices. Hay un clima hostil a las inversiones, la seguridad jurídica es débil y los mensajes agresivos hacia el exterior no ayudan”.
De la parte del Gobierno, el ministro coordinador de la Política Económica, Diego Borja, minimiza el valor de estos rankings, al señalar que no toman en cuenta muchas otras cosas positivas que sí se hacen al interior del país.
De la misma manera, la ministra coordinadora de la Producción, Nathalie Cely, afirma que en materia productiva “se está trabajando profundamente en programas de incentivo productivo”.
Según declaraciones pasadas del presidente Rafael Correa, este tipo de índices son “sesgados” y no representan la realidad nacional.
Y aunque Spurrier, en su análisis afirma que “ciertamente hay un sesgo ya que las mediciones están vinculadas fuertemente con cuán amigable es un país a la inversión y créditos privados, particularmente extranjeros”, asegura que la imagen del país hacia los inversores se ha debilitado principalmente en los últimos años.
Más sobre los índices
Según el Grupo Faro, en el país se ha retrocedido en lo que respecta a las posibilidades de acceder a información oportuna, precisa y confiable.
La revista The Economist ubicó en 2009 a Ecuador en el último puesto en América del Sur en lo que tiene relación con preparación electrónica.
Las calificadoras de riesgo Standard and Poor’s, Moody’s y Fitch Ratings ponen a Ecuador en una situación incómoda para atraer inversiones.