Luego de diez días de retraso, el Gobierno anunció su estimación de crecimiento de la economía ecuatoriana. Ayer, el Banco Central publicó la cifra: 3,73%, inferior al 6,8% que había previsto a inicios de este año. Con ello, el Gobierno, tal como lo señaló el ministro de Finanzas, Patricio Rivera, hace varias semanas, deberá hacer ajustes.
“Si bien todos los países realizan ajustes en el primer semestre del año, el panorama para el Régimen es difícil ya que previó un crecimiento significativa mayor y en base a ello armó su Presupuesto. Se alertó s que había sobrestimación y no se hizo caso. Es preocupante”, afirma el analista Pablo Espín.
El Central también estimó que el consumo de los hogares seguirá en alza hasta un 4,86%. Asimismo, la formación Bruta de Capital (un indicador de la actividad empresarial) se prevé que crezca en 7,88%.
Por su parte, el Gobierno también ve optimista el desenvolvimiento del comercio exterior, estimando que las exportaciones crecerán 3,12%, aunque en menor proporción que las importaciones (8,99%).
El sector de servicios con una mejora de 16,5% y comercio al por mayor y menor, con 14,6%, serán las actividades que sostendrán gran parte del ejercicio económico del último semestre del año. La estimación de la agricultura y ganadería, con una mejora del 10,3%, es lo más resaltable del informe.
La cifra de crecimiento del país va a tono con las proyecciones que habían dado la Corporación Andina de Fomento (CAF) y el Fondo Monetario Internacional (FMI), que anunciaban para el país una mejora de entre 3 y 4%. Este valor es menor a lo que países vecinos han proyectado.