Al final de la comparecencia del ex presidente de Cofiec, Antonio Buñay, lo único que quedó como resultado fue la misma pregunta con la que estalló el escándalo: ¿quién o quiénes fueron los responsables del otorgamiento del crédito de USD 800 000 al argentino Gastó Duzac?
La comparecencia de más de dos horas de quien hasta hace pocas horas era el principal sospechoso estuvo plagada de contradicciones, respuestas escuetas y la devolución de la “pelotita” a los ejecutivos que acompañaron el proceso de concesión del préstamo, en diciembre del año pasado. Buñay deslindó cualquier irregularidad en su accionar mientras ejerció la jefatura de la entidad y endilgó la responsabilidad a Cofiec.
Sin embargo, en su defensa al bombardeo de preguntas de los asambleíastas, Buñay, pese a su tranquilidad, se contradijo en algunas ocasiones y en otras solo respondió una y otra vez “desconozco eso“. Quizás su contradicción más visible fue el hecho de asegurar que recibió la llamada del titular del Fideicomiso AGD-CFN No Más Impunidad, Pedro Delgado, quien le comunicó que su cuñado, Francisco Endara Clavijo, le llamaría para una reunión con empresarios argentinos, entre ellos Duzac. Pero ante el asombro de todos, luego de unos minutos Buñay negó haber hablado antes con Delgado.
Al final de la comparecencia, se tendieron más sombras sobre este polémico caso, por lo que la presidenta de la Comisión de Fiscalización, Silvia Salgado, anunció que los miembros de esa mesa se sentarán a puerta cerrada para analizar toda la documentación recibida y las comparecencias efectuadas antes de llamar a más involucrados.