En plena crisis financiera y con la prima de riesgo descontrolada, España recibió hoy un respiro por parte de Bruselas: el comisario de Asuntos Económicos y Monetarios de la UE, Olli Rehn, propuso darle un año más de lo previsto, hasta 2014, para que cumpla con el 3 por ciento de déficit público. “España es el único país en el que la economía se contraerá en 2012 y 2013”, dijo Rehn en Bruselas, al presentar las recomendaciones presupuestarias.
Este alivio llegó en medio de la crisis por la nacionalización de Bankia, la cuarta entidad financiera del país, que junto a las dudas sobre la permanencia de Grecia en el euro ha disparado la prima de riesgo española a niveles históricos y peligrosos. Hoy cerró en un nuevo máximo histórico desde la creación del euro: 539 puntos básicos.
Durante la jornada llegó a alcanzar los 541 puntos. La rentabilidad del bono español a diez años frente al alemán terminó en el 6,66 por ciento una jornada en la que la Bolsa española continúo su hundimiento, en niveles de 2003.
El selectivo Ibex 35 perdió un 2,58 por ciento y cerró en un nuevo mínimo anual, de 6.090 puntos, acumulando ya unas pérdidas anuales del 28,90 por ciento. Bankia se dejó un 10 por ciento en el parquet madrileño.
El gobierno de Mariano Rajoy va a rescatar a la entidad y a su matriz, el Banco Financiero y de Ahorros (BFA), con una inyección de 19 000 millones de euros, aunque todavía no está claro cómo lo hará.
Bankia y BFA se encuentran fuertemente lastradas por los activos tóxicos derivados del estallido de la burbuja inmobiliaria en la que España vivió durante muchos años. Ese problema se extiende en mayor o menor medida a todo el sistema financiero español, generando gran desconfianza hacia España en los mercados.
Tanto el gobierno español como el Banco Central Europeo (BCE) desmitieron hoy al “Financial Times”, que aseguró que el organismo monetario ha rechazado un plan del Ejecutivo de Rajoy para inyectar esos 19 000 millones de euros a través de deuda pública, que luego el banco podría usar como garantía ante el BCE para obtener liquidez.
El BCE no ha rechazado nada porque el gobierno “no ha presentado ningún plan”, aseguró el ministro de Economía, Luis de Guindos. “Al contrario de lo publicado hoy en los medios, el BCE no fue consultado y no se pronunció sobre los planes de las autoridades españolas para recapitalizar un importante banco”, señaló el propio organismo.
Fuentes gubernamentales indicaron a medios españoles que la inyección de capital del Estado se hará en efectivo, mediante dinero recaudado en subastas ordinarias de deuda del Tesoro.
Antes de esa inyección se llevará a cabo la nacionalización de BFA mediante la conversión en acciones de los casi 4 500 millones de euros que el fondo de rescate FROB prestó ya al banco a finales de 2010.
A cambio de la prórroga de un año para cumplir con el 3 por ciento de déficit público, España tendrá que llevar a cabo más reformas y medidas de consolidación fiscal y presentar un plan presupuestario “convincente” para 2013 y 2014.
Bruselas espera también que se reduzca el gasto de las comunidades autónomas. El ministro de Hacienda español, Cristóbal Montoro, aseguró que España, como socio “fiable y leal”, cumplirá con las nuevas recomendaciones formuladas por la Comisión Europea para corregir los desequilibrios financieros estructurales.
El país, que en el primer trimestre de 2012 ha entrado en recesión por segunda vez en tres años, se había comprometido con la Unión Europea (UE) a reducir su déficit público al 3,0 por ciento para el final de 2013, cumpliendo así entonces con el Pacto de Estabilidad.
La prórroga hasta 2014 propuesta hoy por el comisario Rehn debe ser aprobada por los ministros de Finanzas del bloque. Para este año, el gobierno de Rajoy se ha comprometido a reducir el abultado déficit público español hasta el 5,3 por ciento del PIB, desde el 8,9 por ciento con el que cerró en 2011.
En toda esta crisis, Rehn está actuando de forma muy cuidadosa con España, la cuarta economía del bloque europeo. De hecho, el comisario finlandés tenía instrumentos que le hubieran podido permitir anunciar sanciones contra el país por no respetar los compromisos de déficit. “España ha actuado con decisión para llevar a cabo reformas estructurales”, dijo el comisario de Asuntos Monetarios, con la vista puesta en la reforma del mercado laboral y del sistema de pensiones.
En lo que el comisario se mostró más cauteloso fue en lo relativo al rescate de Bankia y un posible papel en él de la UE. “El gobierno español aún no ha decidido cómo actuará en el rescate de Bankia”, dijo Rehn. Aún no está claro, añadió, qué efectos puede tener en el déficit. Círculos diplomáticos en Bruselas no descartan que Madrid tenga finalmente que acudir a un rescate europeo.
Entretanto, el presidente de la Comisión Europea, José Manuel Durao Barroso, defendió hoy que los países de la zona euro deberían encaminarse hacia una “unión bancaria” con un único organismo regulador y un único esquema de garantía de depósitos.
El Ejecutivo europeo impulsará medidas en ese sentido que se analizarán en la próxima cumbre del bloque, el 28 y 29 de junio.