El presidente del Banco Mundial, Robert Zoellick, advirtió hoy de que no existe una “fórmula mágica” para los problemas de la eurozona y subrayó que ésta no debe esperar demasiado de las naciones emergentes para superar su crisis de deuda, sino que tiene que actuar por sí misma para afrontar este problema.
“Cuando leo algunas de las noticias, hay una búsqueda de una fórmula mágica, hay un deseo de decir ‘oh, alguien va a venir aquí a sacarnos las castañas del fuego'”, dijo Zoellick en teleconferencia con periodistas en Washington respecto a reportes sobre la posibilidad de que los BRICS (Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica) anuncien esta semana en la capital estadounidense medidas para ayudar a superar la crisis de la eurozona.
“Estoy haciendo todo lo posible para lograr que los políticos afronten la realidad: y la realidad es que la eurozona va a tener que resolver los problemas de la eurozona”, subrayó Zoellick.
Cualquier otra cosa, advirtió, puede constituir una “distracción” que aleja a las naciones europeas de su prioridad, que debe ser “tomar las decisiones difíciles que tienen que tomar”.
Similares declaraciones hizo también Zoellick al diario “The Wall Street Journal” en una entrevista publicada hoy mismo, en la que insiste en que no hay una “panacea” para el problema de la eurozona. “No existe una panacea. Nadie va a venir con una gran bolsa de dinero para comprar el problema”, insistió.
Durante su conversación con periodistas en Washington, Zoellick además manifestó sus dudas sobre la capacidad o voluntad de algunos de los principales países emergentes, como China, para realizar acciones que verdaderamente tengan un impacto en la crisis europea.
“Si uno examina bien las declaraciones que vienen de China o de otros mercados emergentes, hay una sensación de que se quiere apoyar al mundo desarrollado, particularmente a la eurozona en un momento de crisis, pero eso es distinto a poner dinero”, puntualizó.
“Puede que haya ocasiones en que los fondos estén dispuestos a hacer algunas inversiones (…) pero también se oyen voces desde China sobre poner dinero que ha sido arduamente ganado por personas que tienen una renta per cápita de unos 4 000 dólares para rescatar a Europa, así que no creo que esto vaya a pasar”, agregó. “Y por ello, creo que de alguna forma esto se convierte en una distracción, cuando la clave es que se afronten los (problemas) fundamentales”, insistió