El principal implicado en el escándalo de posible soborno por parte de la Cervecería Nacional, Alfredo Larrea Jijón, protagonizó ayer un escape al más puro estilo de la película ‘Indiana Jones’.
El hermano del Secretario de la Corte Constitucional, Arturo Larrea Jijón, debía rendir declaración en la Fiscalía General del Estado, ubicada en las avs. Eloy Alfaro y Amazonas, en Quito. Una denuncia del asambleísta Galo Lara lo acusa de haber recibido USD 1,05 millones para mover sus influencias dentro de la Corte y lograr un fallo favorable a la Cervecería.
La compañía mantenía desde hace tres años un litigio laboral con ex trabajadores. Estos piden que se les cancele USD 90 millones por utilidades.
Alfredo Larrea Jijón llegó 30 minutos antes de la hora señalada (15:00) adelantándose a los reporteros y cámaras de los medios de comunicación. Pero a su salida de la Fiscalía, y tras pasar el detector de metales y la puerta principal, se abrió espacio a empujones y emprendió una carrera por la av. Eloy Alfaro y luego por la calle Alpallana.
Los periodistas corrían atrás de él buscando una declaración. Incluso, lo persiguieron sobre una camioneta, pero no lograron alcanzarlo, mientras las personas que pasaban por el lugar gritaban “¡Cógele, cógele!”.
Es así como Larrea Jijón, un deportista que entrenaba diariamente en el parque La Carolina, en el norte de Quito, hizo gala de su capacidad aeróbica y logró escabullirse de los reporteros.
Según funcionarios de la Fiscalía, Larrea Jijón entregó por escrito su declaración, la cual estuvo prevista inicialmente para el jueves pasado, pero su abogado pidió una ampliación.