La Asamblea de Mujeres Populares Diversas del Ecuador (AMPDE) propuso hoy, 8 de diciembre del 2014, que el Estado asuma el 100% del costo de la afiliación del ama de casa al Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social.
El planteamiento se presentó a la Comisión de los Derechos de los Trabajadores que tramita el proyecto de Ley de Justicia Laboral y Reconocimiento del Trabajo No Remunerado en el Hogar.
La reforma busca que las amas de casa del país accedan, a través de la afiliación, a una pensión jubilar. El aporte para acceder al beneficio será de acuerdo a una tabla según los ingresos de su hogar. El Estado subsidiará una parte.
Para los hogares de más bajos recursos, por ejemplo, el aporte es de USD 11,2. De esos, el ama de casa aportará USD 2 y el resto el Estado.
Judith Flores, representante de AMPDE, señaló que las mujeres ya aportan un 15,41% de ingresos al Producto Interno Bruto (PIB) y, por eso, el Estado debe asumir el 100% de ese aporte.
“Sin las amas de casa la economía del país no podría funcionar. Si mañana una mujer no cuida de sus hijos, ustedes no estarían aquí. Si mañana ustedes no tienen sus ternos limpios, ustedes no podrían trabajar. Si mañana las mujeres deciden no cocinar, los obreros tendrían que ir a comprar su comida”, increpó Flores a los asambleístas del organismo legislativo.
Además de la retención de los excedentes de utilidades de los trabajadores como establece el proyecto de Ley, la AMPDE propuso que se financie este beneficio con las utilidades de las empresas de los sectores estratégicos, como petroleras, mineras, entre otras.
“Las empresas, si han tenido un porcentaje permanente de ganancia, deben responder su carga de responsabilidad social financiando esto. Si estamos hablando de justicia social y de una verdadera revolución ciudadana, hay que hacer un ejercicio de redistribución”.
Betty Carrillo, titular de la Comisión, dijo que el Estado cubriría, en cierto sentido, el 100% del financiamiento, pues los USD 2 que pagará el ama de casa se descontarán del Bono de Desarrollo Humano (BDH), que ya es un aporte estatal.
Pero para Flores, algunas amas de casa, en especial de los sectores de pesca artesanal y recolectoras de los manglares, viven al día y necesitan ese dinero.
“USD 2 en el caso de muchas familias es la leche de toda la semana, es la diferencia de si como o no carne. USD 2 es la diferencia de si puedo llevar o no a mi hijo al centro de salud. Parece que no es nada USD 2, pero ese monto cambia la vida de muchas mujeres”, dijo Flores.
La organización social también planteó que el proyecto no solo contemple el beneficio de la pensión sino las contingencias de enfermedad, maternidad, riesgos del trabajo y pensión de vejez por discapacidad.