El FMI llegó en febrero del 2019 a un acuerdo técnico, el cual fue firmado por el Directorio del Fondo el mes siguiente. Foto: Archivo EL COMERCIO
El acuerdo económico que Ecuador firmó con el Fondo Monetario Internacional (FMI), para recibir USD 4 189 millones hasta el 2021, cumplió un año el pasado miércoles 11 de marzo de 2020.
El presidente Lenín Moreno ratificó el martes que seguirá con el programa.
Y el multilateral confirmó el pasado jueves 12 de marzod e 2020 que continuará apoyando a Ecuador “frente al desafiante y cambiante entorno económico”, en alusión a la caída del precio del petróleo y el impacto económico del coronavirus, que ha deteriorado la percepción de riesgo del Ecuador ante los inversionistas.
Gerry Rice, vocero del Fondo, señaló también que el organismo ve como “pasos positivos” las medidas anunciadas el martes para enfrentar los choques externos.
En la revisión realizada en noviembre pasado, el organismo relajó los objetivos relacionados con las reservas internacionales y con el monto del déficit en el presupuesto. La decisión se tomó debido a los efectos económicos de la paralización de octubre.
Aunque las nuevas metas se fijaron en términos más flexibles, el Ejecutivo no cumplió con la meta de reservas esperada para fin de año.
En marzo, además, el Gobierno debe enviar a la Asamblea la reforma fiscal y, para ello, dialoga con las bancadas del organismo.
El cronograma de desembolsos también sufrió cambios en este primer año.
Por ejemplo, el Fondo decidió hacer la segunda y tercera revisión de metas en una sola visita y condicionó la entrega de recursos a la presentación de reformas legales (fiscal y monetaria) al Legislativo.
Debido a esto, el desembolso previsto para septiembre llegó recién a finales de año.
Actualmente, el FMI y el Gobierno pulen un nuevo ajuste a las fechas de los desembolsos.
En marzo, el Fisco debió recibir el cuarto desembolso por USD 348 millones si cumplía con las metas del último trimestre del 2019. Pero el dinero no ha llegado todavía.
El Ministerio de Finanzas dijo que el nuevo calendario estará listo la próxima semana.
Según el titular de esa Cartera de Estado, Richard Martínez, este es un mes complejo para la caja fiscal, porque se deben pagar casi USD 1 000 millones por amortizaciones de deuda e intereses.
La situación se agrava, dijo, por el desplome del precio del petróleo en estos días.
Magdalena Barreiro, docente de la Universidad San Francisco de Quito y exministra de Finanzas, señala que la decisión de ambas partes de seguir con el plan económico no ha calmado a los mercados.
Además, ni el Fondo ni el Gobierno han explicado por qué no se dio la cuarta revisión que debía hacerse en febrero.
“Los inversionistas han visto cómo el FMI ha ajustado las metas, pero ni así el país ha logrado cumplir y lo castigan en los mercados”, dijo Barreiro.
Los inversionistas perciben a Ecuador como el segundo país emergente más riesgoso de la región, solo detrás de Venezuela, lo cual se refleja en el índice de riesgo país.
El indicador de Ecuador alcanzó ayer un nuevo récord y se ubicó en 3 652 puntos.
El 11 de marzo del 2019, cuando se firmó el acuerdo, estuvo en 612 puntos.
Mauricio Pozo, exministro de Finanzas, dice que el Fondo es más flexible que antes, pero cree que el futuro del acuerdo es complicado, por la debilidad política del Gobierno para tomar las decisiones de cambios estructurales acordados con el multilateral.
Jaime Reusche, vicepresidente Senior de crédito de Moody’s Investors Service y analista soberano de Ecuador, señaló que las decisiones de austeridad anunciadas por el Gobierno podrían ayudar a compensar parcialmente los menores ingresos por la fuerte caída de los precios del crudo.
Pero cree que el Gobierno enfrentará una fuerte resistencia social y política ante dichas medidas económicas.
Además, Reusche considera que los rendimientos prohibitivos de los bonos de Ecuador sugieren que el Estado no podrá depender del financiamiento del mercado para cubrir sus necesidades.
“En consecuencia, esperamos que la liquidez se mantenga muy apretada ante el complicado programa de pago de deuda a partir de 2022”, dijo el personero de la calificadora.