Este viernes 2 de octubre del 2020 se cerró la circulación vehicular en la calle Joaquín Pinto para que los 22 comerciantes de esa zona instalen sus mesas y negocios. Foto: Eduardo Terán / EL COMERCIO
El plan de reactivación económica denominado ‘La Mariscal se toma las calles’ continuó desde las 11:00 de este viernes 2 de octubre del 2020. En esta ocasión se cerró la circulación vehicular en la calle Joaquín Pinto para que los 22 comerciantes de esa zona instalen sus mesas y negocios.
Quienes caminaron a lo largo de esa vía encontraron una diversa oferta gastronómica a pie de vereda como salchipapas, hamburguesas, sánduches, embutidos, entre otros. El objetivo del proyecto es evitar aglomeraciones en los locales y atender a más clientes.
Al mismo tiempo, los músicos alistaban sus instrumentos para brindar espectáculos artísticos. También los titiriteros y malabaristas.
Ana Bastidas, administradora de la zona especial turística La Mariscal, indicó que los propietarios de negocios ubicados fueron autorizados para el uso ordenado del espacio público y así poder ofrecer productos cumpliendo las medidas de bioseguridad.
Con ello se busca beneficiar a comerciantes, nuevos emprendedores, restaurantes y a la comunidad de esta zona turística que antes de la pandemia era una de las más visitadas.
La primera jornada de reactivación económica se realizó en la avenida Amazonas en donde actualmente funcionan 32 establecimientos de comidas y bebidas, artistas y talleres de bicicletas.
La segunda fue en la calle Lizardo García con 12 locales gastronómicos y varias presentaciones de danza, música clásica, saxofón y marionetas. Las autoridades indicaron que el proyecto fue configurado para niños y adultos. “Se cuenta con espacios para que los infantes puedan divertirse de forma segura y se recuperen los juegos tradicionales”, se informó en el Municipio.
De otro lado, los dueños de negocios de la calle Joaquín Pinto esperaban recuperarse de las pérdidas económicas generadas por la pandemia.
Tanya Proaño, dueña del negocio ‘La Huerta de Vicky’, la cual comercializa miel de abeja, dulces y toda clase de embutidos. “Nuestros productos son de Latacunga y son 100% naturales. La ciudad tiene que dinamizarse. Es la primera vez que participo en la feria”.
Ella trabaja por Internet, pero aspira mejorar las ventas hoy y mañana. “Yo laboraba en el sector turístico, pero todo se estancó por el covid-19”.
Carolina Mantilla es propietaria del local ‘Perniles del Campo’. Aseguró que con las ferias los clientes se van a sentir más cómodos y sin temor a exponerse a aglomeraciones. “También trabajamos con pedidos a domicilios”.
Pamela Ron, dueña del Hostal Almagro, esperaba que el turismo se recupere con las nuevas iniciativas. “Queremos que regrese el turista, que la gente vuelva acá como antes para vivir momentos amenos. Muchos negocios han quebrado”.